El barefoot es toda una novedad y una tendencia en auge dentro del sector del deporte y el ejercicio físico.
Se trata de una técnica consistente en correr descalzo o con un fino calzado que apenas cuenta con amortiguación.
Conocido también como running minimalista, el barefoot tiene cada vez más seguidores debido a que, además de fortalecer los músculos, trae consigo un menor número de lesiones.
Correr descalzo o con unas fina sandalias
Aunque la palabra barefoot define al running que se realiza sin zapatos, son muchas las personas que se decantan por correr con unas finas y flexibles sandalias con las que obtienen un efecto similar al que conseguirían si practicaran este deporte sin ningún tipo de calzado.
Cómo empezar a practicar barefoot
Si quieres ponerte en forma y el barefoot ha captado tu atención, será importante que seas constante y tengas paciencia.
Ten en cuenta que los seres humanos estamos acostumbrados a caminar y a correr con deportivas, por lo que empezar a hacerlo descalzos puede traer consigo la aparición de dolores y molestias en los pies y en las piernas.
¿Un consejo? Empezar poco a poco practicando barefoot durante unos minutos al día e ir aumentando la duración de forma progresiva para que el cuerpo se adapte lo mejor posible a esta novedosa modalidad.
Las mejores superficies para practicar barefoot
¿Vas a animarte a incluir el barefoot en tu vida? En ese caso puedes comenzar a practicar este deporte corriendo sin zapatos por el césped o la arena, dos superficies blanditas y muy agradables.
Huye, no obstante, de los suelos plagados de piedras que puedan provocar la aparición de heridas, rasguños y arañazos en la planta de los pies.
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