Cuando estamos invitadas a una boda siempre queremos ir monas. Además de la novia, también es impresionante ver los looks cuidados hasta el mínimo detalle de todas las invitadas. Por mi edad, me encuentro con que tengo muchas bodas todos los años y aunque no me importa repetir conjunto, sí es cierto que me encanta estrenar. Lo malo de los vestidos de invitadas de boda es que no son especialmente baratos en la mayoría de los casos y que solo los lucimos una vez.
Por eso, ya es la segunda ocasión en la que decido alquilar uun vestido de invitada de boda. Esta vez he confiado en La Más Mona, un showroom con escaparate online en el que encontramos vestidos y complementos ideales para bodas, fiestas y demás acontecimientos.
Como la boda era en Donosti en estas fechas, lo vi claro desde el principio: este espectacular vestido de Luisa Beccaria un tanto otoñal y abrigadito de encaje y con una largura por debajo de las rodillas.
Lo combiné con complementos en plata, estos zapatos de Uterqüe y el bolsito caja de Zara. Al ser un vestido especial en sí mismo, decidí no meter más complementos, ya que la prenda en sí habla por sí sola.
¿Qué os parece?
La verdad es que lo de poder alquiler vestidos me parece una gran idea y una comodidad. Además, nos permite lucir vestidos de grandes firmas muy especiales a las que tal vez no tendríamos acceso.
¿Os habéis animado a alquilar vestidos alguna vez?
Fuente: este post proviene de Dos en la Pasarela, donde puedes consultar el contenido original.
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