Hola chicas. Hoy os enseño una nueva entrada con otra de mis adquisiciones en las rebajas. Ya os hablé en mi anterior entrada de lo encantada que me había quedado con la marca Sally Hansen. Así que, aprovechando que en Sephora están a mitad de precio, compré un esmalte verde menta precioso, protagonista del siguiente nail art. ¿Os apetece ver qué he hecho con él?
Hasta hace no mucho, yo era de las que pensaba que los colores vivos son para el verano y la primavera y los oscuros para el otoño y el invierno. Sin embargo, como en todo en esta vida, hay matices. Los tonos pasteles, aunque sean claros, pueden quedar preciosos en nuestras uñas (y también en nuestra ropa) en invierno. Tal es el caso de este verde menta, que al ser poco saturado y pasteloso, queda muy bonito en nuestra manicura.
Sally Hansen me sorprende como marca porque además de secar rápido y dejar mucho brillo en las uñas, cubre genial. Los pasteles siempre necesitan un par de capas para quedar bien (a veces hasta tres), pero con este tono no ha hecho falta. ¡Cubre muchísimo!
Por supuesto, puedo decir maravillas del nude de RARE nails. Con una capa cubre bien, aunque en este caso prefiero dar dos pasadas para que quede perfectamente opaco. Me encanta para llevarlo sin nada más en las uñas, porque da un aspecto muy sano y cuidado a la manicura.
Si me seguís, ya os habréis dado cuenta de que el chevron es una de mis técnicas favoritas. Creo que es muy versátil y, sobre todo, muy sencilla. Por si no lo habéis visto anteriormente o sois nuevas en el mundo del nail art, os dejo aquí cómo se hace.
Creo que lo que más me gusta de este nail art es que se ve muy delicado y femenino.
¿No os transmite ese sentimiento?
Me encantaría saber qué os ha parecido la combinación de colores; como sabéis, lo bueno del nude es que ayuda a dar más protagonismo al color principal.
Espero que os haya gustado esta manicura tanto como a mí. ¡Muchos besos!