Hoy os traigo un producto que me enviaron como parte de una colaboración desde Nurbesten. Esta web es la versión alemana de Born Pretty Store y, la única diferencia que tienen con ellos es que la página está con precios en euros y escrita en alemana. Los envíos (al menos los míos) siguen saliendo desde China (aunque este último creo que viene desde Singapur) y por lo demás, ninguna variación.
Venga, que me lío. ¿Os enseño la manicura y os cuento qué tal estas water decals?
En este enlace tenéis acceso al artículo. Estas water decals cuestan 2,14 y hay varios diseños donde elegir. En mi caso, escogí el C100. Vienen dos hileras para que cortemos de modo que se adapten al tamaño de nuestras uñas, y aproximadamente da para 10 plantillitas. Esto es: 2,14 por una única manicura (un chollo tampoco es que sea, visto así me parece caro).
¿Sabéis lo que son las water decals? Estoy segura de que muchas ya lo sabréis, pero para las que no os cuento brevemente que se trata de un producto idéntico a las calcomanías que venían en el bollycao cuando éramos pequeños (¿qué habrá sido de ese bollo? ¡Qué hambre!).
Primero quitamos el plástico transparente que protege el diseño.
Lo recortamos para que tenga el tamaño de nuestra uña.
Lo sumergimos, sujetándolo con unas pinzas, en agua a temperatura ambiente durante unos 20 segundos.
Lo sacamos y retiramos el diseño (se verá transparente) del cartoncito blanco donde se encuentra.
Aplicamos el diseño en la uña.
Estas water decals no me han gustado para nada. Era súper complicado retirar el film transparente que las protegía, ¡un auténtico jaleo! Tardé más en quitar este plastiquillo que en hacerme la manicura, os lo prometo.
Además, como veis en la uña del dedo corazón de la mano derecha (arriba, en foto), la pegatina había que ponerla en el sentido correcto. Esto, os juro, no me ha pasado nunca, siempre puedo poner la calcomanía sobre mi uña en el sentido que yo quiera. Insisto en que lo mismo puedo estar equivocada, pero a mí nunca me ha pasado esto...
Vamos, que para el precio que tienen yo probaría a comprar otras water decals. Por lo menos, que incluyeran más diseños que no solo me dieran para una única manicura.
Lo bueno de este diseño es que estrené este esmalte de Benecos que mi amiga Alicia (Nailactica) me regaló hace cosa de un mes. Benecos es una marca de cosmética natural que apuesta por productos libres de componentes dañinos y químicos perjudiciales. No podía ser de otro modo y sus esmaltes son 4free: están libres de tolueno, ftalatos, formaldehídos y alcanfor.
El color del esmalte me ha encantado, es un rosa que tira mucho a malva (Ali sabe perfectamente que siempre he sido más de rosas que de rojos ^_^) y además, la aplicación ha sido muy sencilla gracias al pincel pequeño pero manejable. El color es cremoso y súper cubriente. Di dos capas para que durase más pero con una capa podría haberme bastado.
El otro esmalte que os enseño es Vanidosa, de Masglo. Sobre esta marca no tengo que deciros nada porque junto con Essie y Deborah Milano está en mi top3 de pintaúñas. Sin embargo, el tono Vanidosa no me ha hecho especial ilusión.
Llevaba con él desde el Salon Look de 2015 y aún no lo había estrenado porque al verlo en el frasco nunca sabía en qué manicura usarlo. Por la gama de morados de las water decals, me pareció buena idea usarlo pero... ¡no sé! El acabado metálico no es de mis favoritos para las manicuras y, sinceramente, no me acabo de ver con él. ¿Qué os parece a vosotras?
Y finalmente, me despido de vosotras con mi pijama de El Monstruo de las Galletas, que me acompañó durante esta estupenda sesión de fotos :)
Un beso enorme