Mascarilla de café
Es ideal para esos días en los que despierto con la cara ligeramente hinchada y funciona para todo tipo de piel. Esta mascarilla exfoliante me ayuda a remover las células muertas, lo cual es genial porque una piel exfoliada absorbe mejor las propiedades de los productos de cuidado diario.
La uso en el rostro, pero tengo entendido que gracias a su efecto tonificante funciona para cualquier parte del cuerpo, lo mejor de todo es que es facilísima.
Necesitarás:
Residuos de café colado (Lo que queda en el cedazo o colador luego de hacer el café)
Crema hidratante de tu preferencia
Mezcla la “borra” del café (así le dice mi mamá) con tu crema hidratante hasta que se forme una pasta homogénea. Aplica en el rostro limpio o en la zona a tratar dando suaves masajes de forma circular.
Si tu piel es bastante tolerante puedes dejarla unos 15 minutos y luego aclarar con agua, a mi en particular me da un poquito de picazón así que tan pronto siento alguna molestia la retiro. Finalizo pasando un algodón con agua de azahar y luego aplico mi hidratante.
Me gusta esta mascarilla porque es una manera efectiva y gentil de exfoliar mi rostro sin lastimarlo, es económica, refrescante y tonifica mi piel.
Mascarilla de avena, limón y miel
La miel suaviza y nutre la piel ya que aporta vitaminas, minerales y antioxidantes, la avena ayuda a aliviar la sequedad de la piel y a mantener un adecuado equilibrio de humedad. Mientras que el limón actúa como un maravilloso exfoliante natural ademas de ser útil a la hora de aclarar las manchas, juntos son tres ingredientes ideales para combinar a la hora de cuidar la piel naturalmente.
Un detalle importante a considerar es evitar la exposición al sol, de lo contrario el limón puede manchar la piel. Si eres muy sensible y el limón te causa irritación sustitúyelo por agua.
Necesitarás:
1 cucharada de avena
1 cucharada de zumo de limón
1 cucharada de miel de abejas
Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una pasta y aplica sobre la piel limpia. Deja actuar por unos 15 minutos aproximadamente y luego aclara con agua. Finaliza con una hidratante.
Me encanta porque deja la piel suavecita y fresca, lista para el maquillaje. Me gusta mucho y siempre que puedo la uso.
Mascarilla de bicarbonato de sodio
Éste es un tratamiento sencillo y súper efectivo, donde el bicarbonato ayuda a secar las espinillas y eliminar el exceso de grasa en el rostro.
Es mi favorita, la uso continuamente porque la mejoría en el aspecto de mi piel es realmente notable de inmediato, dejándola suavecita y con los poros mas finos.
Para atacar las eternas manchas de cicatrices de acné la preparo con zumo de limón, pero si no tengo a la mano lo sustituyo por agua. Si eres de piel sensible te recomiendo primero probar aplicando una cantidad pequeñita en alguna parte de tu rostro y si no sientes molestia aplica el resto.
Necesitarás:
1 cucharada de bicarbonato de sodio
Agua o zumo de limón
Mezcla el bicarbonato de sodio con limón o agua hasta obtener una pasta, aplica en el rostro limpio y deja secar, luego aclara con abundante agua y finaliza con la hidratante de tu preferencia.
Nuevamente te sugiero que según tu nivel de tolerancia decidas que ingredientes usar, puedes probar primero con mezclar el bicarbonato con el agua y si te va bien intenta en el futuro con limón. Si sientes que es muy abrasiva vuelve al bicarbonato con agua.
Estas tres opciones de cuidado de la piel las uso cada 8 ó 10 días, dependiendo de lo que tenga en casa y del tiempo que disponga para ellas.
Si eres de piel grasa como yo, puedes complementar estos tratamientos con agua de arroz que también es excelente, hace un tiempo coloqué en mi instagram mi receta para prepararla, pero si no la viste aquí te la dejo nuevamente.
Atrévete a usarlas y luego me cuentas que tal te va. Si tienes alguna mascarilla o truco de belleza especial compártelo en los comentarios.
Espero disfrutaras de este post tanto como yo, si te gustó regálame un me gusta y compártelo en tus redes sociales.
Nos leemos pronto…
Besitos.