El truco es utilizar siempre productos buenos y sobre todo, adecuados al tipo de pelo de cada uno. Yo en este momento estoy usando los acondicionadores Aqua Gel de Biolage, específicos para pelo fino y muy fino. Se trata de unos acondicionadores que limpian en profundidad, acondicionan y además son ecológicos, sin aceites, sin siliconas y sin prácticamente alcoholes grasos.
Es cierto que he oído a muchas chicas que no utilizan acondicionador porque piensan que les engrasa el pelo y le dan peso. Pues precisamente a ellas les recomiendo la gama Aqua Gel porque su tecnología hace revivir el cabello más lacio y sin añadir peso. Al contrario, aporta cuerpo y flexibilidad y fortalece las melenas más débiles.
En mi caso estoy utilizando Aqua Gel Smoothproof, específico para cabello fino y encrespado. Con este producto consigo un pelo más liso, una mayor hidratación y un secado más rápido, algo fundamental teniendo en cuenta que me tengo que secar el pelo toooooooodos los días.
Pero hay otras 3 gamas:
Aqua Gel Colorlast: para cabello fino y coloreado. Aporta suavidad, flexibilidad y disciplina.
Aqua Gel Volumebloom: para cabello ultrafino. Da más densidad, más cuerpo y eleva las raíces.
Aqua Gel Hydrasource: para cabello fino y seco. Para una mayor absorción y densidad.
La forma de empleo es muy básica, como la de cualquier acondicionador. Primero hay que lavar la melena con champú, si es de la misma gama pues mejor que mejor. Y después, aplicar el acondicionador sobre el cabello húmedo por mechones dejándolo actuar de 3 a 5 minutos. El tercer paso es, obviamente, aclarar.
Si lo probáis, veréis qué bien se desenreda el pelo y lo suave que se queda. Es una maravilla. Por no decir, lo bien que huelen los 4 acondicionadores de Aqua Gel
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