Guía esencial de maquillaje, ¡descúbrela!

 



¡Hola de nuevo!

Tras unas semanas de parón, volvemos a la carga con una nueva reseña de unos productos que han estado siempre en mi neceser y que, seguramente no falten nunca y menos ahora con el maquillaje nude tan de moda. Los polvos, ya sea en su versión translúcida, suelta o compacta son un aliado perfecto, tanto como para acabar y retocar nuestro maquillaje, como para usarlo sólo como base ligera. Pero, ¿qué diferencia hay entre ellos?

Puede que, aunque nunca hayáis utilizado este tipo de productos, os suenen porque llevan usándose desde hace mucho, mucho tiempo y sino, ¿quién no se acuerda de las hermanastras malvadas de Cenicienta empolvándose la nariz para ver al príncipe? Eso sí, ahora tanto la composición como la tonalidad de los polvos han pasado de un blanco – casi talco- a una gran variedad adaptándose a las necesidades de cada una.

Con el post de hoy no sólo quiero hacer una reseña, sino también daros una pequeña guía de cuál es el producto que mejor se puede adaptar a vuestras necesidades, porque cada tipo de polvo tiene su truco y no todos se usan para lo mismo.

Polvos translúcidos

En primer lugar tenemos los polvos translúcidos. Este tipo de polvos están pensados para su aplicación después del maquillaje, ya que su función principal es la de fijar nuestra base sin aportar un extra de color, aunque al ser un producto blanquecino siempre tiende a aclarar un poco la piel.

Tienen una textura muy suave y ligera, aportando un efecto seda muy natural en la piel, por lo que es el aliado perfecto si sueles maquillarte con frecuencia y buscas un acabado más fresco. Normalmente se venden en forma granulada suelta junto con una esponja como aplicador, aunque también podemos usar una brocha ancha, esto variará según los gustos.

Como os decía, su función principal es fijar la base del maquillaje, asegurando que dure un mayor tiempo y eliminar brillos y el exceso de humedad de la piel, pero además podemos usarlo en zonas concretas como para prolongar la duración de líneas y sombras de ojos, pintalabios e incluso puede servir para disimular, si te has pasado con el colorete.

Para este tipo de productos te recomiendo los Invisible powder de KIKO (11,95€) o los Polvos Sueltos Translúcidos Mary Kay (18€) pero hay muchos otros.

Polvos sueltos

Por otro lado tenemos la versión con color de los translúcidos, pasando a ser polvos sueltos. Su función sería básicamente la misma que la anterior, fijar el maquillaje y eliminar brillos, pero en este caso al tener un poco de color se puede utilizar para retocar algunas zonas a lo largo del día. Otro uso es disimular las variaciones del tono del maquillaje con nuestro color, ideal por ejemplo en verano, que podemos dar un toque más oscuro a nuestro maquillaje sin necesidad de comprar otro tono.

Los productos que hasta ahora he utilizado de este estilo son de L’Oréal pero, el concepto suelto cada vez se comercializa menos, por lo que es más difícil de encontrar ya que casi todo ha pasado a la versión compacta de la que más abajo os contaré.

Accord Perfect Minerals (nº7 Amber) y Glam Bronze Minerals (nº102)



Tanto la versión clara como la bronceadora me encantan, están hechos a base de minerales esenciales, sin conservantes, no aportan grasa, tienen un SPF15 e incluye una brocha suave que facilita su aplicación pero que personalmente no me gusta mucho, prefiero una brocha más larga para expandir los polvos.

Estos puedes conseguirlos vía Amazon, aunque L’Oréal ha sacado una nueva versión en concepto compacto que promete bastante.

Polvos compactos

Por último tenemos los polvos compactos – los cuales adoro-. Ya os he ido adelantando poco a poco que es el producto estrella en esta gama y del que más variedad hay ahora mismo en el mercado. Están tan de moda porque es un producto ideal para el día a día o para cuando empiezas a maquillarte, ya que es muy fácil de aplicar y deja la piel maquillada, pero sin maquillaje gracias al concepto “compacto” con el que se aplica en nuestra piel una capa de color más gruesa.

Sigue teniendo el efecto final seda que los sueltos, pero ahora te permite disimular mucho mejor todos esos aspectos de nuestra piel que no nos gustan como: brillos, granitos, ojeras, etc. sin tener que pasar mucho tiempo teniendo que estar maquillando, expandiendo, retocando…

Pero aunque sea fácil de aplicar tiene sus trucos, así que os dejo estos consejos:

Lo primero es que uséis siempre una hidratante de base, porque aunque parezca que no estamos aportando apenas producto a nuestra piel, lo estamos haciendo, y debemos protegerla. Si utilizáis una BB o CC Cream antes, este producto os vendrá muy bien para matificar los posibles brillos.

Segundo, si queréis tapar imperfecciones, aplicar y difuminar previamente con un corrector color carne, el verde no lo tapa bien porque no es una capa densa como cuando usamos maquillaje.

Para las personas que tengan el párpado graso, si aplicáis con una esponja – que no brocha- el producto en el párpado, sobre todo el superior antes de pintarlo, te va a ayudar a fijar tanto líneas de ojos como sombras durante más tiempo.

Finalmente, no os aconsejo que lo apliquéis después del maquillaje porque estaríamos aportando dos productos “gruesos” para nuestra piel y podría quedar un efecto muy artificial, así que sólo para retocar horas después de habernos maquillado. En cuanto a las reseñas, en tipo compacto he probado varios, pero los dos que más me gustan por su relación calidad/precio son:

Polvos Compactos  Deliplus Color – 6€



Mercadona tiene en su sección de cosmética estos polvos compactos efecto seda que he comprado ya…miles de veces. Su precio no me parece que está nada mal, además se extiende con bastante facilidad con una brocha (yo uso la especial para polvos de Deliplus 6€) e incluye una esponja que para la zona de párpados viene muy bien. Lo uso prácticamente a diario y me dura de 5 a 6 meses, aunque si lo utilizais poco no os preocupéis porque es un producto que dura abierto hasta los 30 meses. Y algo muy importante, si se os cae no suele romperse con facilidad, aunque todo es posible (en la foto podéis ver como ya se está desgastando el mío, pero aún le queda mucho por delante).

Un aspecto negativo es la variedad de color, que es un poco limitada con sólo cuatro opciones, pero en mi caso, el nº2 se adapta perfectamente a mi tono durante todo el año, menos en verano, que al ponerme más morena tengo que subir al nº3.

Essence mattifying compac powder – 3,50€ aprox.



Aunque estoy encantada con Deliplus por probar otra marca, me pasé por BodyBell y compré los polvos de Essence del número 04 perfect beige..

He de decir que es un producto que no está del todo mal e indica que es apto para todo tipo de pieles, por lo que si el anterior no te ha ido bien este puede hacerlo y a un precio mejor. En cuanto a su aplicación, se extiende bien pero tienes que insistir algo más para que cubra bien toda la cara, pero si te gusta aplicar poco producto en la piel este es un producto ideal para ti.

Peeeeero de forma negativa tengo que decir que no es apto para patosas, en cuanto se cae al suelo se rompe. Lo compré el día 3 de marzo y al segundo día se me cayó rompiéndose una esquina, nada importante, pero el viernes a la segunda caída ¡PUM! polvos rotos por todo el baño, así que sólo he podido probarlos durante 1 mes.

Ahora me toca comprar otro y aunque me gusta el de mercadona quiero probar alguno que incluya SPF y componentes más naturales ya que lo uso a diario y me gusta proteger mi piel, sobre todo de cara al veranito. ¿Alguna ha probado polvos de este estilo? ¿cuál me recomendáis?

Espero vuestras respuestas en comentarios y nos vemos dentro de poco con otro post