El aloe vera o Sábila es una planta con multitud de propiedades y beneficios para nuestro organismo. Para aprovechar esas propiedades, debemos extraer el gel que hay en sus hojas.
Es un proceso muy fácil, con el que vamos a obtener un gel transparente, que podremos emplear en cosmética y en usos alimentarios.
El aloe vera es anti inflamatorio, y regenerador de tejidos. Es un antiséptico natural, por lo que puede ser utilizado en heridas y quemaduras. Favorece la cicatrización y alivia el dolor y la inflamación.
Contiene vitaminas y aminoácidos. Mejora la circulación tras su aplicación en la piel.
Debido a su alto contenido en saponina, penetra en la piel y limpia los poros..Se puede usar en todo tipo de pieles, y en especial, en pieles sensibles.
Actúa como astringente natural en la higiene del rostro. Previene el envejecimiento. Además es rico en colágeno y elastina.
Al ser tan buen cicatrizante, es estupendo para aplicarlo en pieles con acné. También es muy hidratante y calmante.
Teniendo tantas propiedades para nuestra piel, sin contar las que tiene para nuestro organismo si la consumimos en batidos o bebidas, os voy a enseñar como extraer el gel de las hojas del aloe.
En las hojas, hay unas sustancias, el acibar y la aloina, que son perjudiciales para el organismo, y tenemos que eliminar. Esto se hace, dejando las hojas en un vaso de agua, durante 24 horas boca abajo, con la parte cortada hacia abajo. De esta forma sueltan todo lo perjudicial en el agua.
Transcurrido ese tiempo, vereis que el agua se ha vuelto rojiza, y ya tenemos nuestras hojas o pencas de aloe listas para prepararlas.
Si quieres ver el proceso paso a paso, te dejo un vídeo donde lo puedes ver muy bien.
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