Lo que la marca nos dice acerca de este producto es que se trata de una crema de día anti-edad y transformadora de la piel; promete cero imperfecciones al primer contacto, hidrata 24 horas y a largo plazo reduce arrugas y manchas, mejorando la calidad de la piel. Contiene 7 activos: LHA, pro-retinol, vitamina C, B3 y B5, péptidos tensores y gengibre antioxidante.
Todo lo que acabo de decir es lo que nos cuenta Garnier de manera literal acerca del producto, ahora os cuento mi experiencia: yo compré este producto no porque realmente lo necesitara, sino por curiosodad pura y dura, estaba haciendo la compra en Mercadona y lo ví allí, lo probé en mi mano y la textura me llamó bastante la atención, así que él solito se lanzó en el carro de la compra y se vino a casa. (Precio 10.65?)
La crema en sí misma tiene una textura fluída, con un tono inicialmente amarillento, que cuando lo vamos extendiendo se torna en un tono piel; a pesar de esto último no penséis que estamos ante una crema con color, porque su cobertura es inexistente, al menos yo no noto que aporte nada de cobertura, por lo que a no ser que tengáis una piel con cero imperfecciones, no váis a notar que éstas desaparecen, quero decir imperfecciones tipo granitos, pequeñas cicatrices etc...
Lo que sí hace esta crema, y por eso debo decir que me gusta mucho, es que unifica el tono de la piel, tiene un efecto aclarante y luminoso, pero dejando la piel mate, no satinada ni con brillitos, no penséis para nada en una Strobe de Mac, el efecto es totalmente diferente, más sutil, más llevadero y natural y por eso esta crema me encanta.
La uso muchísimo a diario, ya que no soy una persona que me aplique base de maquillaje todos los días, y con ella lo que consigo es tener buen aspecto al instante, entendiendo como tal un efecto muy sutil, una mejora visible, evidente de nuestra piel en conjunto, pero sin camuflar ni tapar, como ya he dicho marquitas que sean evidentes ni ojeras marcadas, para eso necesitamos corrector si es que las queremos tapar.
Me sirve para no tener mala cara en esos días en los que no me voy a maquillar por falta de ganas o de tiempo, es un efecto que dura todo el día, además como no aporta color no tienes el riesgo de que se parchee o se vaya estropeando con las horas.
En cuanto a hidratación, para pieles mixtas va bien, es ligera y no noto que aporte nada de grasa, aunque sí es muy probable que se quede corta de hidratación para pieles secas.
Obviamente no puedo decir nada de los efectos anti-edad que se consiguen a largo plazo, ya que no ha pasado tiempo suficiente como para poder apreciar nada de eso, aunque sí que es un valor añadido a una crema de este tipo.
Os voy a dejar una foto de los ingredientes por si tenéis curiosidad (clickar para ampliar):
En definitiva os puedo decir que es uno de los productos que más y mejor me ha sorprendido últimamente, teniendo en cuenta además que su precio me parece asequible para los resultados y para los 50 ml que trae.
Se ha convertido en un básico en mi rutina diaria, aunque debo decir que no me gusta como prebase de maquillaje, noto que la base aplicada encima de esta crema no se desliza ni de distribuye del todo bien, por lo que no recomiendo este uso.
Al margen de esto la única pega que le puedo poner es que el envase tiene la boquilla muy grande y es difícil dosificar bien el producto (es exactamente el mismo envase que el de su BB Cream para pieles normales).
Si buscáis un producto de estas características, efectivo y asequible, yo os recomiendo esta Miracle Cream de Garnier, un producto cuando menos interesante y diferente a todo lo que había probado hasta el momento.
Eso es todo por hoy. Un abrazo a tod@s!!
Fuente: este post proviene de El Tocador de Martina, donde puedes consultar el contenido original.
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