Weve all been there. While working out, we feel a lot of tireness. Our muscles hurt and seem not to resist further effort, and even our hearts seem to be about to jump out of our mouths. What to do then? Stopping is not an option, but Im giving you three that you can opt to.
[imagen de base: kaylaitsines.com]
Si más de una vez, mientras entrenabas y te has sentido muy cansado, has sentido la tentación de parar de golpe y esperar a que tu ritmo de respiración se recupere o tus músculos vuelvan a tener fuerza, recuerda que no es la mejor opción que puedes tomar. Primero, porque no es recomendable hacer una parada brusca y segundo porque evitarás que tu cuerpo se acostumbre al esfuerzo. Pero como no queremos tampoco que mueras en el intento -y no bromeo con esto visto lo visto últimamente en las noticias, en las que más de tres corredores de maratones han fallecido por el sobreesfuerzo, por poner un ejemplo-, hay tres cosas que sí puedes hacer:
-Sigue con el ejercicio de cardio, pero bajando el ritmo. Si estás corriendo, en la elíptica, en la bici de spinning, o haciendo HIIT y ya no puedes hacer más burpees, por ejemplo, en lugar de parar del todo para recuperar el aliento, trota despacio, o camina a buen ritmo, o sigue pedaleando más despacio, o haz unos jumping jacks. Hazlo hasta que tus pulsaciones bajen y tu ritmo de respiración se normalice un poco.
-Si estás haciendo pesas y no puedes levantar más pero según tu entrenamiento deberías hacer más repeticiones, mantén la postura en la que el músculo hace más esfuerzo pero sin moverte. Eso sí, asegurándote de que mantienes una buena postura. Ten en cuenta también que a lo mejor debes disminuir el peso que levantas, pero eso es otro tema. Esta opción sirve también si estás haciendo por ejemplo sentadillas con salto o flexiones. En el primer caso, si no puedes seguir más haz una sentadilla y mantente abajo unos segundos, y repite el movimiento hasta que te recuperes. En el caso de las flexiones, si te sientes muy cansado puedes quedarte en una plancha. Así seguirás trabajando los músculos pero dándoles un respiro.
-Sigue haciendo algún ejercicio que te cueste menos, pero no te pares. Cuando estoy haciendo un entrenamiento HIIT y por lo que sea estoy muy cansada y no puedo seguir con el ejercicio que me toca (sobretodo con las flexiones y los mountain climbers), en lugar de pararme me tumbo y hago abdominales. Así por lo menos sigo trabajando, recupero la respiración y no dejo de entrenar.
El caso es seguir adelante, esforzarnos un poco más cada día hasta que consigamos hacer nuestro entrenamiento completo sin tener que pararnos. Pedirle a nuestro cuerpo un poquito más cada vez para hacerlo poco a poco más fuerte, más capaz, más definido y más tonificado. Pero siempre con cuidado, ¿eh?
[Fuente: leanitup.com]
¿Os pasa a menudo que estáis entrenando y se os sale el corazón por la boca? ¿O que os tiemblan todos los músculos y pensáis que no podréis hacer una repetición más? ¿Qué hacéis en esos momentos?