Antes de nada, quiero dejar claro que no soy ninguna makeup artist, ni de lejos. Puede que mi rutina de belleza diaria esté alejada de lo que se debería hacer y puede que los profesionales del maquillaje que lean este post encuentren mil y un fallos. Sin embargo, solo quiero compartir con vosotros cuál es mi rutina de maquillaje y qué productos utilizo.
Como veréis, es bastante básica. La belleza y la cosmética nunca han sido mis fuertes y mi conocimiento es limitado. Pero creo que, quizá, pueda inspirar o ayudar a alguien a encontrar una rutina con la que se sienta cómodo. Lo que yo siempre he buscado ha sido: éxito y rapidez. Soy bastante práctica así que me gustan los productos que me dan buen resultado sin tener que estar una hora delante del espejo.
Pese a que es una rutina básica, sí que es bastante completa. Me gusta darle volumen al rostro contorneándolo, así que no faltan los trazos de iluminador y bronceador. También me gusta combinar varios tipos de un solo elemento, como máscaras de pestañas o iluminadores. El resultado es muy femenino y natural, con un efecto de buena cara. Y lo mejor de todo es que es adaptable a todo tipo de rostros y bolsillos.
ANTES
1- Preparar el rostro
Lo primerísimo de todo es preparar el rostro, que esté limpio e hidratado. Mi rutina de cuidado facial la podéis encontrar en este post, ya que sigo haciendo la misma. Ahora mismo mi crema hidratante de cabecera es Hydra Zen de Lancome. Es muy confortable para mi piel y me deja buena sensación. Además, tiene parte de protección solar, que es algo muy necesario.
2- Prebase o primer
Antes de extender la base, siempre utilizo un primer que alise los poros y que tenga un poquito de color. Ayuda a tapar imperfecciones y deja la piel perfecta para el siguiente paso.
Ahora mismo estoy utilizando una talla mini de The Porefessional, de Benefit. Funciona bien, pero creo que es un producto que esta sobrevalorado. No sé si continuaré con esta crema cuando lo termine.
3- Corrector
Creo que el corrector se puede usar antes y después de la base. Yo he probado ambas opciones y no veo gran diferencia. Por si acaso, prefiero echármelo antes para que se cubra bien. Lo que yo hago es echar un poco de producto en forma de triángulo en la zona de las ojeras y luego en zonas conflictivas y en granitos. Mi forma favorita de fundirlo con la piel es con los dedos, con pequeños toquecitos.
Actualmente estoy utilizando el Fit me! de Maybelline y me va muy, muy bien. Lo recomiendo. Se camufla de maravilla con mi tono de piel y cubre bastante las imperfecciones. Me parece que tiene una buena relación calidad-precio.
4- Base
Para darme la base de maquillaje, lo hago de dos maneras, dependiendo del día o de lo que tenga. Lo normal es que me la extienda con una brocha plana especial para maquillaje líquido, pero también lo hago con las manos, ya que creo que se adapta mejor a mi tono de piel. No suelo usar la Beauty Blender, pero reconozco que funciona bien también.
En este caso, no puedo hablar bien de la base que estoy probando en este momento. Me gusta acabar los productos y por eso no me deshago de ella, pero no estoy nada conforme. Se trata del serum Healthy Mix de Bourjoir. Había leído maravillas sobre esta línea, así que me decidí a probar, pero no funciona conmigo. Es demasiado fluido para mi gusto y el tono no me queda nada bien. No repetiré.
5- Sellar
Antes hacía este paso el último, pero vi que algunas blogueras de belleza lo hacían en este momento, así que me decidí a probar y me convenció. Es el momento de sellar el maquillaje con polvos translúcidos, compactos o de sol (según los llaméis). Yo me los echo con una brocha grande de pelo larguito, la especial para polvos, por todo el rostro y el cuello.
Bourjoir no me ha decepcionado en este sentido. Uso el Poudre Compact Silk Edition y me va estupendamente. Además, dura bastante.
6- Mi parte favorita: iluminar
Estoy obsesionada con la iluminación del rostro porque vivo con la cosa en la cabeza de que mi cara es muy apagada. No sé si es verdad o no, pero a mí me lo parece. He probado distintos tipos y al final el que más me ha gustado ha sido el formato en lápiz (líquido). Me parece que es muy fácil de aplicar. Yo lo aplico como veis en la imagen: triángulos debajo de los ojos (¡cuidado con el efecto oso panda!), triángulo en la frente, hueso de las cejas, nariz, arco de cupido y barbilla. Después lo difumino con los dedos.
Mi favorito, sin duda, es el Lumi Magique de LOreal. No lo puedo recomendar más. Ilumina de maravilla sin dejar esas horribles purpurinas por la cara y se adapta perfectamente, dejando un estilo natural.
7- Y, ahora, lo contrario
Después de dar luz al rostro, hay que darle sombras para generar ese volumen engañoso. Lo que viene siendo el countouring o contorno. También he probado muchísimos estilos y al final el que más me ha convencido ha sido aplicando polvos bronceadores por el hueso de los pómulos, sienes, contorno de la frente, mandíbula y nariz (ambos lados y punta). Lo aplico con una brocha "en diagonal", como yo digo.
Ahora mismo estoy utilizando el clásico Hoola de Benefit. No es que me parezca la gran cosa, pero no están mal. Lo importante con este producto es difuminar bien porque sino parece que nos hemos echado colacao en la cara.
8- Colorete
No tengo un colorete favorito, voy cambiando y probando. En verano suelo preferir el formato en crema porque es más ligero, pero también lo tengo líquido y en polvo. En este caso, utilicé polvos, concretamente la paleta de NYX Sweet Cheeks, uno de los tonos rosados. Lo aplico en las manzanitas del pómulo y lo extiendo hacia las sienes. Intento que se funda con el bronzer para que haga un efecto unificado.
9- Dar forma a las cejas
Ahora que ya tengo todo el rostro terminado, paso a los ojos. Lo primero siempre son las cejas. Las mías son un poco problemáticas, por lo que les hago la forma con plantillas.
Delineo el contorno de la ceja con cuidado con el lápiz Micro Brow Pencil de NYX y luego la relleno por dentro con el Eyebrow Cake Powder Kit, también de NYX.
10- Ojos
Normalmente suelo saltarme este paso porque no terminan de gustarme las sombras y no me queda un look natural casi nunca (falta de práctica), pero cuando lo hago, es así. Primero me doy una base para alisar el párpado, concretamente esta de Catrice. Luego suelo utilizar las paletas de sombras en polvo que vienen ya combinadas, como esta de Wet n Wild.
Lo que siempre hago es aplicarme eyeliner. No tengo preferencia entre lápiz y gel, los uso según el día. Cuando uso lápiz utilizo el Exaggerate de Rimmel, y cuando uso gel utilizo el de Deliplus (este). SÍ, habéis leído bien. Todavía no he encontrado uno mejor. Lo aplico siempre desde la mitad del ojo hacia afuera, ensanchando la raya poco a poco.
Para las pestañas utilizo la máscara Better Than Sex de Too Faced. Recomiendo comprar la talla mini porque dura mucho y al final la gastas en lo que se ha secado la de tamaño normal. Me doy un par de capas de esta y luego remato con False Lash Mariposa de Maybelline, que da un efecto precioso en la mirada.
11- Labios
Este siempre es mi último o penúltimo paso. Tengo miles y millones de labiales diferentes, por lo que no voy a especificar, ya que cada uno tiene una aplicación diferente. No obstante, quiero recomendar la línea de Kate Moss para Rimmel. Mi favorita sin duda. Siempre va uno en mi bolso, todos los días, independientemente de que me haya echado otro o no.
12- Toque de iluminador
Esto ha sido un añadido reciente y me encanta. Para dar un toque de brillo, me doy iluminador en polvo con una brocha en abanico en la zona de la frente, nariz, pómulos y barbilla. Da un toque muy especial. En este caso, utilizo el Strobelight Instant Moon Glow de Milani.
13- Toque final
Ya hemos terminado, pero falta el toque final: spray fijador. Tres pulverizaciones por el rostro y LISTO. Yo uso el Super Stay de Maybelline.
¡Y ya estaría!
DESPUÉS
Fotos hechas por Manuel Laya