Las estrías son como una especie de marca en la piel que con el tiempo se convierten en la lucha de muchas personas, tanto hombres como mujeres aunque en la mayoría de los casos son las mujeres quienes las tienen.
Una estría es el producto de que la piel se atrofie, la misma se caracteriza por tener una forma larga y se hallan en el tejido conjuntivo. Las estrías puedes salir en todo el cuerpo pero los sitios más usuales con los brazos, el abdomen, los senos y las caderas.
Las mismas son visibles, y tienen un aspecto blanco con efecto transparente, aunque a veces también las hay de color moradas que son las que se ubican por debajo de la piel. En sí puede decirse que las estrías son el resultado de la cicatrización del tejido conjuntivo de la piel cuando sucede que la misma se rompe o estira demasiado.
Las estrías usualmente hacen presencia en adolescentes ya que crecen de forma repentina y eso es un cambio drástico para la piel, en mujeres embarazadas, y en las personas que aumentan de peso y adelgazan rápidamente.
Es importante saber que existen diversos tipos de estrías, en total dos tipos que son las estrías blancas y las estrías moradas.
Estrías blancas: Estas no representan ningún riesgo a nivel de la sangre, son las más comunes y suelen presentarse en las mujeres embarazadas luego de dar a luz y en las personas que adelgazan muy rápido.
Estrías moradas: Estas sí son peligrosas para la sangre y por lo general son una señal de que se está padeciendo un problema mucho más grave, por lo que hay que prestarles mucha atención.
Causas de las estrías
La mayoría de las veces el motivo por el cual se generan porque el volumen del cuerpo cambia drásticamente. La piel se caracteriza por su elasticidad y por ende se adapta al tamaño del cuerpo, sin embargo cuando ésta debe estirarse demasiado y en un lapso de tiempo relativamente corto, se provoca una ruptura en las capas internas de la piel y esto luego se verá reflejado en las capas externas en forma de estrías. No obstante, también existen otras causas que contribuyen en la aparición de las estrías, tales como:Descontrol en las hormonas, como cuando se crece demasiado rápido en la etapa de la adolescencia.
Por herencia de la familia, ya que lo elástica y lo resistente que sea la piel dependerá a gran escala de los genes.
El embarazo, ya que en un gran porcentaje de mujeres que se encuentran en proceso de gestación presentan estrías en la zona del ombligo.
La etnia de cada persona también influye mucho, ya que los de raza negra tienen menos probabilidad de presentar estrías.
Hacer demasiado ejercicio de manera descontrolada, ya que esto a veces ocasiona que se desarrolle bastante masa muscular la cual se mantiene mientras estés activo físicamente pero si dejas de hacer ejercicio, lo más probable es que te salgan estrías.
No tomar suficiente agua, ya que esto hace que te deshidrates y por consiguiente la piel se vuelve menos elástica.
Tener mucho estrés puede hacer que se complique la forma en que se oxigenan las células y esto influye negativamente en la piel.
Maneras de evitar las estrías
Añade fuentes de Zinc a tu alimentación: El zinc es un mineral muy importante ya que el mismo ayuda a que funcione correctamente el sistema inmunológico, a que se desarrollen las células y se cicatricen adecuadamente las heridas. Para prevenir que la piel se empiece a agrietar y por ende se desarrollen las estrías es crucial que consumas alimentos que contengan zinc.Bebe bastante agua: Consumir agua es esencial para la salud de la piel, por lo tanto se sugiere que las personas en la etapa de adultez beban alrededor de litro y medio y hasta dos litros de agua si es posible diariamente.
Procura no tener cambios de peso drásticos: Hacer dietas que limiten demasiado con la cuales bajas de peso en poco tiempo solo hacen que tengas mayor riesgo de que te aparezcan estrías y al mismo tiempo afectan a tu salud. Lo ideal es que puedas mantenerte en el peso correcto equilibrada y constantemente. Asimismo, se sugiere que hagas alguna actividad física con cierta frecuencia.
Consume vitaminas provenientes de vegetales: La vitamina A contribuye a que se formen las membranas y mucosas de la piel, y la puedes encontrar en alimentos vegetales y también en alimentos de origen animal. Especialmente en las espinacas, el huevo, la zanahoria y el melón.
La vitamina C es fundamental para que el organismo pueda llevar a cabo el proceso de cicatrización de los tejidos, además mantiene en buen estado a los cartílagos y los vasos sanguíneos. La vitamina la brindan alimentos como la fresa, el kiwi, la naranja y los vegetales de hojas verdes.
En cuanto a la vitamina D, ésta el cuerpo la produce naturalmente cuando el mismo se expone a los rayos solares directamente. Sin embargo también es posible obtenerla mediante otras fuentes, como el huevo, el champiñón y el pescado.