Lo mejor para evitarlo es beber al menos 2 litros de agua al día, especialmente en verano, que aumenta la transpiración, y consumir además alimentos que contengan también un contenido elevado en agua, como pueden ser las frutas.
Una de las mejores opciones es la sandía. Fruta de temporada con un porcentaje de agua del 94,6 % y con muy poquitas calorías, 18 cada 100 gramos. Además de aportarnos aguas, vitaminas y minerales, nos refrescará si la tomamos fresquita de la nevera.
Por estas mismas razones, la sandía se recomienda especialmente en aquellas personas que quieren bajar de peso o tiene problemas de vías urinarias, próstata o riñón.
Y una opción todavía más refrescante para tomar esta fruta es hacer un batido de sandía. Es muy sencillo, tan solo hay que picar un poco de hielo, añadir la sandía y batir. Si no está suficientemente dulce, siempre se puede añadir algún edulcorante acalórico.
A comer sandía, que es sana y rica!!