Hi babes!
Futuro. ¿Os paráis a pensar en las próximas cosas que haréis? O… ¿Sóis más de los que preferís actuar, y sobre ello que venga lo que surga?
En el caso de ser la primera opción, ¿lo consideráis a largo plazo? O… ¿Sóis más de cosillas cercanas, quererlas y trabajarlas?
Yo no se qué considerarme, la verdad. Solía simplemente no tener un futuro en mente, sino un futuro fijo, como precocinado, como si estuviera ahí sí o sí y por inercia tuviera que orientarme a él. Sin embargo, nunca se sabe cuándo puede desorientarse totalmente ese camino. No ser cambiado, no tiene por qué. Simplemente desviado, ampliado, o bifurcado, pudiendo tomar siempre el camino del medio…
Es por eso que ahora mismo puede que no sepáis en qué grupo clasificaros. Puede que en ocasiones no penséis en absoluto que vuestras decisiones puedan orientar algo que hagáis dentro de muchísimo tiempo. Otras, sin embargo, tenéis en cuenta hasta el más mínimo detalle por el típico ¿y si…?
Claro que tiene que importar, claro que tenemos que ocuparnos (que no preocuparnos), claro que lo que hagamos hoy probablemente influya en lo de mañana, y en lo de dentro de 10 años. Sin embargo creo que lo que nunca debemos hacer es dejarnos llevar simplemente por inercia sin pensar en lo que realmente quiere nuestra cabeza. Lo que estaremos haciendo es guiarnos por lo que supuestamente es nato para nosotros.
Creo que la única manera de darnos cuenta de que nos estábamos dejando llevar por lo que está hecho para nosotros, es encontrar las cosas que realmente queremos que estén en nuestro camino. No que vayan a ser las principales, sino las que hagamos lo que hagamos queremos que estén presentes. Sabiendo esto, creo que nos estaremos alejando de equivocarnos… Supongo que elegir el camino de la inercia siempre y cuando lo variemos según lo que necesitamos que esté presente es lo más justo para nuestro futuro, y para nosotros mismos.
Al ver las fotos que hicimos en mi pueblo, una tarde de calor, con una luz aparentemente difícil, no exactamente la luz adecuada quizá para unas fotos de un look; pero sin embargo una luz curiosa, bonita, diferente… me inspiraron al verlas una sensación de bienestar, que guiándome por esta luz, y por los variados colores que llevo -que a pesar de diferentes dan bastante armonía en las fotos-, me vino la sensación de la nostalgia, de la curiosidad, y me vino a la cabeza este tema. Espero que os transmitan lo mismo a vosotros.
Menos el color negro de la camiseta (necesitaba poner un básico entre tanta variedad de color), todos los colores son bastante claros, desgastados, y pastel.
Llevo como base un kimono-chaqueta (por la forma y tejido podría definirlo así) que para las tardes más fresquitas, pero de verano, viene fenomenal. Es de una tienda llamada Estilaria Shop. Es muy variada y completa, la descubrí hace poquito a ver si os gusta!
En consonancia con esta prenda, coloqué estos shorts tan veraniegos (y tan tendencia por el tejido, y el estilo boho sueltito) de Koker. Me gustaron mucho según los ví, por su comodidad y porque son una monada!
Como calzado, metí unas sandalias que también son tendencia en todo su ser: metalizadas + plataforma blanca. Son muy cómodas (ya sabéis que en mi calzado diario es requisito que lo sean) y vienen directas de Lola Blue. Creo que les puedo sacar mucha combinación este verano!
Debido a esta mezcla de estampado + básico + metalizado, como he dicho necesitaba algo muy básico, como es la camiseta negra que llevo.
Como complementos, pulseritas que ya os he enseñado anteriormente: hojas trenzadas de Sierpe & Berrecil, y brazalete plano de Lna Barcelona.
Los pendientes también los he mostrado anteriormente, pero son tan ponibles y a la vez elegantes que los uso muchísimo. Como os dije, son de Vidal&Vidal, aquí los véis mejor!
Gracias, thank you, grace, danke, merci.