A veces se nos olvida que son una parte más de nuestra piel, sólo que por su mayor concentración de queratina, son más duras que el resto. Digo esto porque necesitan los mismos cuidados: hidratación, nutrición y protección.
Hidratación: Al igual que hidratamos el resto de la piel de nuestro cuerpo debemos hacer lo mismo con las manos y uñas, estas por sus caracteristicas fisiológicas especiales y por el uso que hacemos de ellas, necesitan su dosis de hidratación diaria, y si además les dedicamos unos minutos de masaje, aumentaremos la circulación en la zona haciendo que luzcan todavía más sanas, fuertes y brillantes.
Nutrición: A veces estan más debiles de lo normal y en estos casos tenemos que darles un aporte extra de hidratación y cuidados. Es el caso de uñas quebradizas, sin brillo, amarillentas, con hongos, o que no crecen lo suficiente. En estos casos a parte de las cremas es aconsejable el uso de productos más específicos.
– En caso de crecimiento escaso, falta de brillo y roturas, recomendamos aplicar unas gotas de aceites esenciales como el de Jojoba, Rosa Mosqueta, Romero, Argan, de Ricino o aceite de Almendras; bien directamente o unas gotas mezcladas en la crema hidratante.
– Las uñas amarillean por varios motivos, bien por necesidad de respiración, productos químicos o bien por hongos. El primer caso se produce por mantenerlas muchos días pintadas; las uñas necesitan oxigenarse y los esmaltes lo impiden, sobre todo los que se usan en la manicura permanente y semipermanente. De siete días que tiene la semana, cuatro de ellos pueden estar pintadas y tres sin pintar, de esa manera no se amarillean. Nuestro consejo sería que para evitar que los pigmentos fuertes de los esmaltes coloreen la uña es mejor el uso previo de una base, esta mantiene la humedad de la uña y la protege.
¿No habéis observado que en verano con el mar las uñas estan más fuertes y brillantes?….Es por los beneficios del agua del mar, si se vuelven amarillas un remedio casero es meterlas en agua y sal durante unos diez minutos todos los días y cuanto más natural sea la sal mejor, ecológica, gruesa o yodada, una vez al día y volverán a su color inicial.
Sobre los productos químicos, de limpieza o colorantes, lo mejor es proteger las manos con guantes y en el caso de que se coloreen, el mismo remedio del agua y sal. A la hora de usar un quitaesmalte elige siempre que sea sin acetona ya que quema la uña y mejor si tiene una fase oleosa que además la hidrate.
Para evitar los hongos hay que secarlas muy bien, sobre todo las de los pies y como tratamiento, los específicos de farmacia o los productos con Árbol del Té que también funcionan. Nuestro consejo es que antes de cada aplicación se lime bien la uña y después esa lima se tire para evitar futuros contagios.
Con respecto a la alimentación, dieta rica en frutas verduras, pescado y frutos secos; las uñas necesitan vitamina A para permanecer fuertes, alimentos como las zanahorias, calabaza, melón, albaricoque y mango contienen esta vitamina.
Por último unos consejos para mantenerlas fuertes:
-Mejor limarlas que cortarlas
-No quitar las cutículas, retirarlas pero no cortarlas.
-No abusar de manicuras permanentes
-Evita en mayor medida esmaltes que contengan: ftalato de dibutilo(DBP), formalehído y tolueno.
-NO morderlas: ¿Quien no ha sucumbido alguna vez ante esta peculiar costumbre?.. Está claro, pasa hasta en las mejores familias y hay quien hasta tiene mucho arte para hacerlo. Pero como no deja de ser una mala costumbre, hay que intentar modificar este hábito, no sólo por estética sino por salud. Al morderlas se rompe el crecimiento y se deforman, no siempre, pero en la mayoría de los casos. Hay remedios como pintarlas con esmaltes amargos como el conocido Mordex o aplicar aceites como el del Arbol del Té, pero desde luego nada, como la voluntad de no querer hacerlo.
Como decía Albert Einstein: “Hay una fuerza motriz más poderosa que el vapor, la electricidad y la energía atómica: LA VOLUNTAD” y cuanta razón tenía. Esperamos una vez más os guste y os sea de utilidad esta información :).
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