En promedio, los seres humanos generamos una nueva capa de la piel de cada dos a cuatro semanas.
Exfoliar la piel ayuda a destapar los poros, eliminar las células muertas, ocultar las líneas finas y añadir un efecto de resplandor y brillo a la piel. Además al exfoliar la piel el efecto de los productos que apliquemos luego se potenciará.
Consejos para exfoliar la piel:
Durante la ducha efectuar la exfoliación con la piel húmeda. Usar una esponja sintética o de fibras vegetales o guantes de crin para el cuerpo. Para la cara lo mejor es utilizar un limpiador exfoliante, elegir uno específico para tu tipo de piel. Los productos que contienen roca volcánica no son recomendables si tienes la piel seca... pero son ideales para las pieles grasas. En la cara no deben utilizarse productos que contengan piedra pomez... Se debe de frotar el limpiador exfoliante sobre la piel a través de la esponja o con guantes haciendo movimientos circulares. Se debe de ser más suave en partes sensibles del cuerpo, como debajo de los ojos, el cuello y los muslos. Después de lavar la piel a fondo, hay que aplicar una loción humectante especial para el tipo de piel que se tiene. Respeta los tiempos entre tratamientos, consulta las instrucciones de la etiqueta del producto, controla los efectos que tiene sobre tu propia piel el tratamiento (cada organismo pueden responder de forma diferente) Si sientes dolor o irritación despues de la exfoliación reemplaza urgentemente el producto. No abuses de la exfoliación, aún cuando tengas piel grasa. El exceso de exfoliación puede agrabar el problema.
Generalmente se puede hacer una exfoliación corporal dos o tres veces por semana, si tienes piel sensible redúcelo a una vez por semana. Y la exfoliación facial debe realizarse semanalmente o una o dos veces al mes y con productos muy suaves si tu piel es muy sensible.
Notarás resultados inmediatos....
Cuéntanos como notaste tu piel luego de exfoliarla...