La temporada de verano es una época en donde exhibimos mucho nuestros pies, es el momento para brindarle los mejores cuidados para que luzcan perfectos.
Consecuencias de no cuidar tus pies adecuadamente
Los pies mal cuidados, formarán callosidades en los dedos, así como fisuras y grietas en el talón y la planta. Para que podamos evitar todos estos problemas es necesario darles el cuidado diario que ellos requieren, que, aunque no los mostremos mucho eso no cambia el hecho de que se lo merecen.
Para tener nuestros pies bien cuidados no es necesario dedicarle muchas horas, basta con mantener una buena higiene y aplicarle los productos específicos para nuestras necesidades.
Consejos para el cuidado de tus pies
No es normal sentir dolor en los pies. Ante las molestias, debemos atenderlas y si persisten, consultar con un podólogo o un médico.
Examinar regularmente los pies, nos permite detectar anomalías desde el comienzo, como hongos, grietas, cortes, decapado de la piel o el engrosamiento de la misma.
La higiene regular de los pies es de gran importancia, siempre asegurándose de secarlos bien. El corte de las uñas debe ser en forma recta, pero no muy cortas. Los diabéticos deben extremar los cuidados en las uñas, para evitar infecciones.
La elección de los zapatos es fundamental para garantizar el bienestar de los pies. Una buena manera de cerciorarse de que los zapatos nos queden cómodos, es comprándolos hacia el final del día, cuando los pies están más dilatados. Es necesario cambiar los zapatos cuando están muy desgastados o deformados.
Utilizar el calzado adecuado a cada actividad, evita molestias. No utilice el mismo zapato todos los días, es preferible alternar.
Es bueno caminar descalzo por la arena o por la orilla del mar, con el agua masajeando los pies.
Para descongestionar los pies del cansancio diario, es aconsejable hacer un baño de inmersión con sales de baño o sal común y luego, descansar unos minutos con los pies en alto. También se puede sumergirlos alternadamente en agua fría y caliente. Un masaje con crema hidratante luego del baño de pies, resulta drenante y relajante.
Recomendaciones adicionales
- Caminar descalzo, siempre que se pueda
- Andar de puntillas
- Mover los dedos intentando tomar objetos con ellos
- Hacer rotaciones de tobillo
- Ponerlos en alto durante el día, por algunos minutos
- Aplicarse una crema suavizante después del baño y colocarse calcetines de algodón para dormir, una vez a la semana, para hidratarlos
- Sumergirlos en una infusión de menta durante cinco minutos, para descansarlos
- Remojar los pies en agua tibia con unas gotas de esencia de naranjo y frotar con piedra pómez, para exfoliar. Luego aplicar una crema hidratante con germen de trigo.