Un pantalón para todas

Ya sabes lo mucho que nos gusta descubrirte nuevos productos o tiendas ya sean de decoración de moda o de lo que nos sorprenda. Pensamos que si a nosotras nos gusta y nos sigues leyendo, es que te gustan las cosas que te enseñamos.

Esta vez, lo que te traemos es un pantalón mágico que te puede servir a ti y probablemente a todas tus amigas (excepciones a parte). Se trata de un pantalón vaquero diseñado por la marca portuguesa Tiffosi, especialista en prendas vaqueras que ha sido premiado con el premio al producto revelación del año 2016 en la categoría de vaqueros. Otro dato curioso es que los ponen en venta en máquinas expendedoras.







Te preguntarás que como puede ser que un vaquero sirva (supuestamente) para un cuerpo de la talla 32 hasta para una de 52 y el truco claramente está en su ultraflexibilidad que hace que se adapta a los distintos cuerpos. Los modelos que has sacado muy "skinny" con corte clásico, talle alto y push up.

No te creas que lo que te cuento es un post propagandístico en la que hablo si ninguna base a excepción de lo que cuentan en su página. Esta vez hablo con conocimiento de causa ya que cuando los descubrí no me pude resistir a comprarme unos para probar que tal sentaban. De hecho, mientras escribo este post los llevo puestos ;). Lo que me convenció evidentemente es la particularidad de su adaptación a distintas tallas ya que no se tu, pero yo soy un poco yo-yo y voy subiendo y bajando de peso. Esto hace que esté cansada de tener que cambiar de pantalones cada vez que mi cuerpo decida coger o bajar volumen. Es igual de incomodo ir con los pantalones apretujados como llevarlos colgando y con estos pantalones puede que consiga sentirme más cómoda durante esos cambios.

Lo malo puede ser que como los vaqueros van engordando y adelgazando a la vez que tu, no te des cuenta de que ya hablas balleno o eres un cadáver andante (más probable el primero que lo segundo).

Chistes a parte, cuando me llegaron lo primero que hice es probármelos y hacer un mini estudio, si se le puede llamar así, haciendo que se lo probasen mi madre y mi tía (¡gracias mis cobayitas!) ambas mayores de 50 y con una talla 44. Yo que gasto una 36-38 entramos en los mismos pantalones y ambas dijeron que lo tenían cómodo. Vamos que no fue tanto un esto-entra-por-mis-santos-ovarios.




Teniendo en cuenta que llevo como tiempo con ellas en el armario, mi opinión es positiva y no descarto hacerme con otras más adelante. ¿y tu qué opinas?

¡Feliz domingo!