Hoy os traigo un tutorial fácil y sencillo para crear tus propios discos desmaquillantes reutilizables
Todos comenzamos a ser más o menos conscientes de que si no hacemos algo pronto, el planeta se va a la mierda. Por ello, todos los días salen iniciativas como el #Zerowaste o el #Plasticfree para intentar concienciarnos de los pequeños gestos que podemos hacer cada uno de nosotros para intentar frenar la catástrofe. Lo primero que deberíamos tratar de hacer es reducir el número de residuos que generamos. Por ello hoy, os traigo una alternativa a un producto que, al menos en mi caso, siempre ha pertenecido a la categoría de usar y tirar: hoy os enseño cómo fabricar vuestros propios discos desmaquillantes reutilizables, para que al menos, tengamos la conciencia un poquito más tranquila.En este caso, además me encanta haber podido reutilizar retales que me sobraron de otros proyectos DIY (este y este, por si tenéis curiosidad), así que de este modo, cierro el círculo del desperdicio cero. ¿Comenzamos?
Materiales:
Retal de tejido rizado de toalla
Retal de otro tejido, preferiblemente algodón
Máquina de coser
Hilo y materiales de costura
Pasos para confeccionar los discos desmaquillantes reutilizables
Coloca el tejido que hayas seleccionado para el reverso de tus discos del revés y marca el contorno de los mismos con un lapicero y la ayuda de un objeto redondo, como una taza. Haz tantos círculos como discos vayas a confeccionar. En mi caso, como suelo poner un par de lavadoras a la semana, he comenzado confeccionando siete unidades.Recorta todos los círculos en el tejido de algodón y prepara el tejido de toalla para colocarlos encima.
Coloca los discos sobre el rizo de toalla por el lado derecho del tejido y préndelos con ayuda de alfileres. No pongas los alfileres muy cerca de la orilla, para que no se atasquen en la máquina de coser y te sea fácil retirarlos.
Recorta el tejido de toalla a ras con el disco de tejido de algodón. Después, tendrás que coser una costura en zigzag todo al rededor del mismo con tu máquina de coser. Te recomiendo que utilices una puntada pequeña y que remates la costura la principio y al final con unas puntadas en sentido contrario.
Recorta los hilos sobrantes. Te aviso que trabajar con tejido de toalla deja mucho residuo e hilillos por todas partes, así que ten paciencia.
Sin embargo, el resultado y el propósito merecen la pena. Los discos son super suaves, y se pueden aplicar sin problema tanto en el contorno de ojos, como en todo el rostro. Os recomiendo es que los lavéis junto a vuestra colada habitual, si puede ser a una temperatura mínima de 40 grados. Si queréis que os duren mucho tiempo, creo que la mejor idea es introducirlos en una bolsa para lavar lencería, así evitamos que se pierdan por el tambor de la lavadora.
Mi rutina de limpieza facial
Ya que hablamos de limpieza facial, aprovecho también para contaros mi rutina diaria. Soy MUY FAN de la doble limpieza, de hecho, si no ejecuto los dos pasos, no noto la piel limpia de verdad.Para los días de no Make Up, suelo limpiar mi rostro primero con agua micelar, y después con un limpiador jabonoso al agua. Los días que me maquillo, incluyo también un desmaquillador de ojos waterproof, para asegurarme de que elimina por completo los restos de la máscara de pestañas (son puñeteros, eh!). Aquí tenéis una breve opinión de los productos que veis en la foto de más abajo.
Desmaquillante de ojos 2 en 1 de Garnier: Un clásico del súper, cumple todos los requerimientos que le puedes pedir a un producto como este: es efectivo, barato (creo que menos de 3 euros) y fácil de conseguir en casi cualquier sitio.
Agua Micelar Fancy Handy. La compré en Primor y me gustaron su disfusor en spray (muy cómodo) y su precio (2,99 euros). He probado aguas micelares más caras y no he notado diferencia. ¿Vosotras notáis alguna?
Lipiador Suave Espumoso de Clarins para pieles normales a mixtas. Reconozco que este ha sido una de mis primeras experiencias en el mundo de los limpiadores faciales de firma. Es un limpiador al agua. No está mal, aunque la textura la encuentro un poco grasa para una piel mixta, como la mía. Cuesta en torno a los 18 euros. Creo que no repetiré en el futuro, porque el producto no justifica su precio, al menos en mi caso.
Gel Limpiador Espumoso de Cerave. Este producto sí que ha sido un descubrimiento. Llegué hasta él gracias a la cuenta de IG de Ana Santamarina (que os recomiendo encarecidamente a todas las adictas a la cosmética), y la verdad es que estoy encantada: me deja la piel perfectamente limpia y suave sin sensación de tirantez o sequedad que provocan otros limpiadores jabonosos. Además es hipoalergénico y no lleva perfume, así que, definitivamente, es mi limpiador. Puedes encontrarlo en Farmacias y el bote de casi medio litro cuesta en torno a 8-10 euros.
¿Qué os ha parecido este tutorial? ¿Os animáis a confeccionar vuestros propios discos desmaquillantes reutilizables? Por favor, si lo hacéis, no dejéis de etiquetarme en vuestras redes sociales. ¡Compartiré todas las fotos con vuestros proyectos!