No hay RITUAL DE BELLEZA, que no se precie ni que sea efectivo si antes no realizamos una limpieza profunda de nuestra piel, ya podemos tener en nuestras manos el producto más efectivo del mercado, que si antes no hemos seguidos unos pasos previos para dejar nuestro rostro limpio, dicho producto no funcionara adecuadamente.
Por eso hoy os vengo a decir, que para tener una piel maravillosa debemos de limpiarla en profundidad al menos cada 15 días, EXFOLIANDOLA bien, aunque hoy en día existen productos que se pueden usar unas dos veces a la semana ya que son más suaves e incluso llevan algún tratamiento, ya sea retinol ó alfahidroxiácidos, los cuales incrementan la producción de colágeno y elastina (indispensables para la reestructuración de la epidermis y prevenir el envejecimiento).
La mejor manera de aplicarlos es humedeciendo nuestro rostro, limpiar primero con un poquito de gel desmaquillánte y acontinuación aplicar el producto sobre la piel aún húmeda masajeando suavemente haciendo mayor incapie en la zona de la frente y la barbilla.
Tenemos que diferenciar los productos que son para el cuerpo y los que son únicamente para el rostro, ya que de esto depende que el producto realmente cumpla su función pues en caso contrario en vez de beneficioso puede ser perjudicial, ya que la piel del rostro es mucho más fina y sensible.
Aquí os dejo algunas exfoliantes caseras que os ayudaran en vuestros rituales de belleza.
EXFOLIANTE DE AZÚCAR Y ACEITE:
Uno de los exfoliantes caseros para el rostro más económicos y eficaces que podemos encontrar es el azúcar. Lo mejor es combinarlo con un aceite para que sea hidratante, reparador y antiedad como el aceite de oliva para obtener un cutis radiante y lleno de vida. Los ingredientes que necesitas son:
2 cucharadas de azúcar
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra (Nuestro oro liquido).
Uso: Mezclamos ambos ingredientes hasta obtener una pasta granulosa. Aplica sobre el rostro bien limpio y masajear circularmente con movimientos siempre ascendentes y suaves.
MASCARILLA DE ARCILLA VERDE:
Ideal para las pieles sensibles es depurativa, regeneradora y cicatrizante, actúa solamente en la parte externa de la epidermis y dejara nuestro rostro suave y limpio de impurezas. Esta arcilla la venden en herbolarios, y se diluirá con un poquito de ACEITE de OLIVA o CALÉNDULA,hasta conseguir una textura espesa, una vez bien mezclada la repartiremos por la zona que deseamos EXFOLIAR, masajearemos en círculos y dejaremos actuar unos 10 min. Una vez pasado dicho tiempo retiraremos con ayuda de agua tibia y un algodón. A continuación podemos aplicar una buena crema hidratante.
SAL DEL HIMALAYA (ROSA): Es una receta ideal si tienes la piel grasa o resistente, o bien demasiado envejecida y sucia. Es una exfoliación muy fuerte, así que ten cuidado si la aplicas cuando hay sol o de día. Mejor al atardecer. Esta sal es rica en minerales, por eso es mejor que las demás. No obstante, no te preocupes si no la encuentras, puedes usar la sal gruesa o marina. Te servirá para nutrir las capas más profundas y cicatrizar.
2 Cucharadas de Sal.
1 cucharada de aceite de oliva virgen extra (Nuestro oro liquido).
Aplica en la zona que deseas exfoliar, con círculos suaves. Lava bien y luego aplica un poco de aceite esencial de jazmín o lavanda (para piel seca o envejecida) o tomillo o manzanilla (para piel grasa o con acné).