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Forma de hacerlo
La forma más fácil y cómoda de exfoliarse es cuando nos duchamos, masajeando las diferentes zonas (con el producto que elegimos) activando la circulación y eliminando así células muertas e impurezas, luego enjuagando bien con agua fría.Los productos exfoliantes se deben aplicar en la piel humedecida mediante un ligero masaje, realizado siempre con movimientos circulares en la zona del vientre, caderas y glúteos, y con movimientos ascendentes en las extremidades, prestando especial atención a las zonas más secas y ásperas como codos, rodillas y tobillos.
La exfoliación debe hacerse en cualquier momento que la piel lo necesite.
Es recomendable exfoliarse luego de las vacaciones, sobre todo cuando se tomó sol, ya que la exfoliación afina la piel, dejándola suave y más luminosa sin perder el bronceado. Y éste no es un tratamiento, como se suele pensar, típicamente femenino, sino que es igual de necesario en los hombres, cuya piel más gruesa acumula las mismas impurezas.
Otro momento indicado es antes de comenzar un tratamiento, porque limpia en profundidad, dejando penetrar mejor los productos a utilizar. La piel que renace tras esa exfoliación se hallará más preparada para recibir cualquier tratamiento de belleza, además de haber disfrutado de un agradable masaje. Si bien en verano la exfoliación puede realizarse una vez por semana, en invierno este plazo se puede alargar a quince días en las pieles más finas o secas, o cada diez días en las que presenten mayor resistencia o sean fundamentalmente grasas o mixtas. De todas formas, cada piel es un mundo propio y nadie mejor que uno mismo es capaz de evaluar sus necesidades.
Beneficios
- Promueve la renovación celular.- Elimina impurezas.
- Activa la circulación.
- Da luminosidad a la piel.
- Deja la piel más suave.
- Mejora arrugas superficiales.
- Se puede realizar en cualquier momento del año.
- La puede realizar uno mismo.
A pesar de todos estos beneficios debemos tener en cuenta:
No es recomendable la exfoliación en personas con enfermedades dermatológicas como psoriasis, eczemas, personas con cicatrices (patológicas), rosáceas, herpes facial, etc., porque pueden exacerbar la enfermedad.
No exfoliar con productos químicos en verano.
No aplicar el exfoliante frotando con fuerza ya que no sólo se irritará la piel, sino que estimulará la producción sebácea.
La primera señal de que la exfoliación es excesiva en el rostro es la aparición de una zona rojiza sobre la fina piel que cubre la parte superior de la mejilla. Si esto sucede, se debe interrumpir la exfoliación hasta que la piel se haya recuperado por completo.
Productos naturales para exfoliar
Lucir un rostro libre de impurezas puede estar al alcance de la despensa. Las frutas y otros ingredientes pueden resultar un excelente exfoliante para todo tipo de piel que, además de nutrirla, le dará un aspecto más juvenil y terso.Preparar mascarillas caseras puede ser bastante sencillo para la limpieza de la piel y, económicamente, es mucho más conveniente que las cremas que se venden en el mercado.
Yogurt y Miel: El acné puede seguir apareciendo apesar de no estar en la adolescencia, inclusive en personas mayores de 30 años. Para esto se recomienda mezclar yogur natural con dos cucharadas de miel, aplicar sobre el rostro y dejar actuar por algunos minutos. Esta preparación hidratará y exfoliará la piel evitando que el acné brote nuevamente.
Fresa: Para pieles que presenten puntos negros en los poros, se recomienda aplastar de tres a cuatro fresas y aplicar sobre el área afectada. Las pepitas de la fresa ayudará a exfoliar la piel así como lo hacen los gránulos que se encuentran en las cremas comerciales. Esta misma pasta puede mezclarse con un poco de miel y así conseguir una textura más consistente que permitirá eliminar células muertas y activar el nacimiento de nuevas.
Papaya: Un excelente producto para disminuir las líneas de expresión es la papaya. Se coloca media taza de pulpa de papaya con una cucharada de miel y se extiende por todo el rostro dejando actuar por 10 minutos. Esta mezcla de retira con agua fría y luego se aplica la crema hidratante habitual.
Avena y Miel, como es bien conocido, actúa como un exfoliante ideal para el rostro. Mezclar un cuarto de taza de avena con media cucharada de miel, se humedece el rostro y se aplica esta masa, dejándola actuar durante 15 minutos.
Avena y Yogurt Otra forma de hidratar y exfoliar la piel es colocar una cucharada de avena en agua caliente, deja reposar por una hora y añade una cucharada de yogur natural. Esta mezcla aplica sobre el rostro con suaves movimientos circulares y retira, después de dos minutos, con agua tibia.
Chocolate. Un dulce producto para el rostro que hidrata, tonifica, revitaliza cutis fatigados, retrasa la aparición de arrugas, entre otros beneficios. Al aplicar chocolate sobre la piel, se verán excelentes resultados. Este tratamiento de chocoterapia se ha vuelto muy popular en sesiones de relajación del cuerpo y qué mejor que relajar la piel del rostro. A un par de onzas de chocolate puro (al 90-100%) coloca unas gotas de aceite de almendras, caliéntalo en una olla y, cuando esté tibio, aplícalo sobre el rostro. Deja actuar por 15 minutos y retíralo con agua. Incluye en tu rutina de belleza la exfoliación. Se notará la diferencia.
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