Qué es la depilación láser
La depilación láser es un procedimiento médico que utiliza un rayo concentrado de luz (láser) para eliminar el vello no deseado.
Durante esta depilación, un láser emite una luz que es absorbida por el pigmento (melanina) del vello. La energía lumínica se convierte en calor, que daña los sacos en forma de tubo dentro de la piel (folículos pilosos) que producen vellos. Este daño inhibe o retrasa el crecimiento futuro del vello.
Mitos de la depilación láser
Para aquellas más jóvenes o para aquellas que simplemente nunca se han hecho la depilación láser, seguro que han escuchado alguna vez que para realizarse esta deben dejarse que el vello de la zona a depilar crezca. Y sin dudas que muchas lo tienen como una información científica la cual se la dice de una colega a la otra.
Lo cierto es que esto es mentira, lo que no se puede es depilar con métodos que tiren del tallo del vello, ya que la depilación láser trata de eliminar este tallo. Por eso lo que hay que saber es que método se puede emplear si deseamos a futuro cercano depilarnos con el método láser.
Recomendaciones previas a la depilación con láser
Es recomendable que se evite la depilación que tire de este tallo como la de cera o el arrancado del mismo por medio de pinza, esto no se debe hacer en un periodo superior a los 10 días previos a la depilación. Pero por otro lado lo que si podremos hacer es depilarnos con cuchilla, con ella seguiremos estando suaves y no arrancara el tallo.
Otras de las cosas que se escuchan sobre la depilación láser es que el vello sale otra vez, y eso no es así, en el cuerpo hay un 99% de efectividad, ya que luego de las 6 sesiones depilatorias el vello no vuelve a salir.
En el único sitio que si hay probabilidades de retorno de crecimiento de vello es en el rostro, pero esto no tiene nada que ver con este método, sino que muchos desordenes hormonales provocan el crecimiento de vello facial.
La depilación láser durante el verano
También se dice que el verano no es muy propicio para este método depilatorio, pero estos son solo mitos, ya que todo depende de la sensibilidad de la piel del que se realice el mismo, ya que pare depilarse no es muy recomendable realizarlo sobre la piel bronceada y luego de depilarse hay ciertas pieles que presentan grandes niveles de sensibilidad, por lo cual no es recomendable tomar sol. O sea que el problema no es el verano, sino que el problema es la gran sensibilidad que presenta la piel ante el bronceado post depilación.