Es muy importante que tengas muy claro los dos conceptos para, posteriormente, ir a las tiendas con la idea adecuada.
Moda vs Estilo ¿en qué te inspiras primero?
Según cualquier diccionario, la moda es un conjunto de prendas de vestir y complementos que se basan en ciertos gustos, usos y costumbres, y que se utilizan durante un período de tiempo determinado. Sus características principales es que suele ser pasajera, todo el mundo lleva lo mismo, y es impuesta. 
Es decir que la moda es una tendencia generalizada, que se impone y pasajera; por el contrario el estilo es propio de cada persona, individual y duradero.
La moda jamás puede ser individual porque nos la meten a todos por los ojos y nos hacen desear esas prendas o complementos. Finalizando con que todo el mundo lleva lo mismo, siente bien o no…
Por lo que si te dejas seducir por esa tendencia en moda y eres ancho o muy alto, por mucho que se lleve, nunca te verás bien.
Ya lo dijo Oscar Wilde: “la moda es algo tan espantoso que es necesario cambiarla cada seis meses.” O el mismísimo William Shakespeare:
“la moda gasta la ropa más rápidamente que el hombre”.
Por otra parte, el estilo es un tema personal, que implica el gusto de cada uno, el conocimiento sobre el propio cuerpo, e incluso la sensibilidad que se tenga.
En resumen, el estilo es más una expresión de gustos de cada persona, mucho más individual y suele quedar mucho mejor que las modas pasajeras.
El hombre que apuesta por vestir con estilo se distingue de los demás y demuestra tener una personalidad que no está sometida a las exigencias de la moda.
A diferencia de la moda, el estilo es duradero, no suele cambiar con facilidad. Sólo varía cuando la persona lo hace, en relación a cambios como la edad o la condición social.
En definitiva, la moda nos iguala pero el estilo nos diferencia y nos convierte en únicos.
Y no quiero olvidar comentarte que la elegancia también influye tanto en el estilo como en la moda… Que sigas la moda no quiere decir que seas elegante, pero que tengas un estilo propio tampoco… Aunque eso ya es otro cantar…
Fuente: este post proviene de Hombre y Estilo, donde puedes consultar el contenido original.
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