El problema es que, sin darnos cuenta, estamos mezclando principios activos con funciones muy diferentes entre sí, lo que conlleva que nuestra piel tiene que lidiar con un batallón de productos que en algunos casos se anulan unos a otros o sobrecargan nuestra piel.
En este artículo os cuento los ingredientes que nunca debemos mezclar sobre nuestra piel.
Belleza letal.
Retinol + depilación facial.
El retinol es uno de los más efectivos principios activos contra el envejecimiento. Es una forma de vitamina A que favorece el recambio celular de la piel, aumenta la producción de nuevas células y estimula la producción de colágeno. Sin embargo, también elimina las células muertas de la capa superficial de la piel, haciéndola más delicada y susceptible al desgarro.
Si se aplica cera tibia o caliente sobre una piel cuyo tratamiento regular contiene retinol, no solo aumentará la sensación de ardor, si no que también puede generar un rasgado o levantamiento de la piel con el tirón de la cera al eliminarla. Para evitar esto, disminuye el porcentaje de retinol al mínimo, o mejor elimínalo, una semana antes del tratamiento con cera.
Peróxido de benzoílo + retinol.
El peróxido de benzoílo es uno de los componentes más comunes en el tratamiento contra el acné. Puede que una misma persona padezca brotes de acné al mismo tiempo que presenta arrugas o líneas de expresión, y puede darse el caso de que se esté tratando con peróxido de benzoílo para el acné y al mismo tiempo retinol para tratar el envejecimiento. El problema es que estos dos componentes estimulan la regeneración celular y ya por separado pueden causar descamación de la piel. La combinación de estos dos productos podrías asemejarse a mezclar Red Bull con anfetaminas. Es demasiada estimulación para la piel y puede conducir a todo tipo de problemas, desde la descamación extrema, sequedad, enrojecimiento, ampollas y cicatrices.
Como recomendación, si necesitas utilizar estos don productos, uno por la mañana y otro por la noche. La concentración de retinol ha de ser suave para evitar irritación y debe aplicarse solo por la noche, ya que la luz del sol inhabilita el retinol. Asimismo, utiliza un tratamiento de peróxido de benzoílo no más fuerte que el 5% de concentración durante el día como tratamiento local.
Aceites faciales + ácido hialurónico.
El ácido hialurónico tiene la capacidad de mantener 1.000 veces su peso en agua, por lo que es extremadamente hidratante. Reduce las arrugas, hidrata en profundidad y da a la piel un aspecto jugoso y saludable. Para obtener todos sus beneficios, cuando te dispogas a utilizarlo evita este paso en falso:
No aplicar nunca el AH sobre aceites, cremas demasiado densas o petróleo (vaselina).
¿Por qué? El AH en en base agua y no puede penetrar el aceite, lo que significa que no puede llegar hasta la piel para ejercer su función. Para que su efectividad des completa debe aplicarse con la piel muy limpia, desengrasada y seca.
Los pasos serían:
Limpiar la piel en profundidad con un limpiador libre de aceites.
Con la piel totalmente seca, aplicar el ácido hialurónico.
Esperar unos minutos hasta que la piel absorba por completo el producto.
Una vez absorbido podemos aplicar nuestro tratamiento habitual, incluso los aceites, ya que el AH ya habrá penetrado sin encontrar barreras “pegajosas”.
Exfoliantes químicos + retinol.
Por la misma razón que no se debe depilar una zona de piel que recientemente ha sido tratada con retinol, tampoco debe realizarse un peeling químico mientras se usa retinol. Aunque ambos son excelentes para disminuir la aparición de arrugas (incluso el retinol ha demostrado ser una gran arma en la batalla contra el acné), la combinación de estas dos sustáncias puede causar irritación extrema.
El retinol o Retin-A (la forma de prescripción más fuerte de retinol) hace que la barrera cutánea sea más permeable, lo que significa que los ingredientes de un peeling químico conseguirán profundizar en la piel más rápido. Aunque parezca una buena idea el agilizar el tratamiento y hacer que penetre más profundamente, la realidad es que esa es la receta ideal para reacciones físicas como ardor, irritación, enrojecimiento, descamación, costras, hinchazón y ampollas. Un peelin demasiado profundo también puede aumentar las probabilidades de infección post-peeling, especialmente si no puedes resistir la tentación de aplicar maquillaje sobre la piel afectada para cubrir el enrojecimiento.
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