¡Inauguro sección nueva en el blog! Y la vamos a llamar “Desmaquillarse correctamente”. En ella os voy a ir mostrando los pasos que suelo hacer para desmaquillarme el rostro y mis productos favoritos de cada categoría. ¿Os gusta la idea?
Pues hoy toca el primer paso: limpiadora en aceite/bálsamo/manteca. Y lo mejor es que no estoy sola en esta entrada… ¿Queréis saber más? ¡Pues vamos allá!
Cuando llegamos a casa por la tarde/noche, cansadxs y sin ganas de hacer nada, el hecho de desmaquillarse puede transformarse en una misión imposible. Lo sé, compañerx, yo he estado en esa misma situación en innumerables ocasiones.
Pero creedme cuando os digo que la piel nota la diferencia. Los simples pasos que os voy a ir explicando de aquí en adelante pueden hacer que nuestro rostro se vea más perfecto que nunca. Y todo simplemente venciendo la pereza.
El primer paso de desmaquillado es la “limpieza con aceites” (o algo semejante que se adapte a tus necesidades y tipo de piel).
Yo sé que las pieles grasas/mixtas, cuando escuchan la palabra “aceite” corren sin mirar atrás. Pero no, en este caso no hay motivo para huir. Dejemos a un lado el miedo a los aceites y abracemos sus propiedades como se merecen.
La idea básica de este primer paso es que “el aceite disuelve el aceite”. Sí, como lo leéis. Después de todo un día generando nuestra propia grasita y/o con maquillaje en el rostro, el mejor aliado para empezar a disolver y retirar todo ese mezcladillo es el aceite. Según las necesidades de tu piel, puedes coger aceite de coco o de jojoba, por ejemplo, y proceder a frotarlo por tu rostro y ojos. Luego pasaremos a retirarlo con una gamuza o manopla (es el método más eficaz), y a lavar nuestro rostro con jabón (ya os explicaré más adelante qué jabón suelo utilizar).
Pero, por experiencia propia, suele ser más cómodo utilizar alternativas algo menos pringosas. Aquí es cuando te adentras en el mundo de las mantecas o los bálsamos desmaquillantes. Es mucho más sencillo de utilizar que los aceites, y su eficacia es la misma. Incluso, pueden aportarnos propiedades extra que los aceites no tienen.
Mi bálsamo favorito para este menester es el Bálsamo Desquamante Herbal Infusion de Noray Cosméticos.
La semana pasada os presentaba la marca y os hablaba de mi crema facial de día favorita. Si no habéis visto esa entrada, os la dejo aquí el enlace –> ¿Piel mixta/grasa? Crema perfecta para regularla y luchar contra el envejecimiento
Hoy le toca el turno a su Bálsamo Desquamante (sí sí, se escribe así, no estoy equivocada ) Herbal Infusion
Lo que dice la marca
Descripción
Noray nos dice que este bálsamo tiene una alta capacidad para eliminar los restos de maquillaje. Además, incorpora una técnica que unifica el desmaquillado con un sistema de limpieza profesional. Sus ingredientes proporcionan una capacidad exfoliante delicada y progresiva, que se puede usar diariamente gracias a los fitoextractos que incorpora la fórmula.
Su novedosa técnica oxigena la piel, tonificándola y despertando su luminosidad natural.
Resultados
Con ella, limpiamos nuestra piel en profundidad, y a la vez, nos realizamos un suave peeling. Tiene una textura espumosa que, al entrar en contacto con el agua, hace que retirar los restos de maquillaje y las impurezas sea una tarea muchísimo más fácil. Así, evitamos que se obstruyan los poros e impedimos una descamación normal de las células muertas más superficiales.
Esta función facilitará la posterior aplicación de productos, ya que ayudará a que penetren muchísimo mejor sus componentes.
No contiene SLES y sus extractos vegetales actúan como purificantes, pero respetando el equilibrio natural de nuestra piel.
Es apto para todo tipo de pieles, incluso para pieles sensibles.
Activos esenciales
Cúrcuma: es un antioxidante vegetal muy potente, que también purifica la piel y elimina las impurezas que impiden su luminosidad.
Centella asiática: tiene propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias.
Equinácea: es un excelente calmante de la piel, ayudando a que se desinflamen sus tejidos. Además, combate las bacterias que originan el acné.
Jengibre: repara, regenera e inhibe la producción de radicales libres.
Modo de aplicación
1.- Aplicar una pequeña cantidad sobre la piel del rostro seca.
2.- Humedecer los dedos y emulsionar el producto con movimientos circulares.
3.- Volver a humedecerlos y masajear. Repetir este paso hasta terminar con toda la espuma (esto es muy importante para su total eficacia)
Análisis de los ingredientes
Aquí os dejo un enlace al análisis de los ingredientes que he creado en Cosdna
Precio
19.90€
Dónde comprar
En su página web –> Bálsamo Desquamante Herbal Infusion
Otros puntos de venta (tiendas físicas) –> Puntos de venta Noray
Mi opinión
Llevo utilizándolo como parte de mi rutina de desmaquillado desde que me llegó, hará unas cuantas semanas.
Lo único que he notado es que es un poquito más flojo a la hora de desmaquillar los ojos, pero tampoco veo que indique por ninguna parte que esa sea su función. Eso sí, no escuece ni deja ningún tipo de molestia al utilizarlo en esta zona.
Centrándonos en el rostro, me parece que todo lo que promete lo podemos obtener: piel limpia, tonificada, y más luminosa.
Respecto al modo de empleo, es muy sencillo de usar, nada “pringoso” o desagradable. Conforme vas humedeciendo los dedos y masajeando, se va retirando toda la espuma, y con ella el maquillaje.
Eso sí, cuando apenas queda nada, me gusta pasarme una manopla desmaquillante para retirar los últimos restos y asegurarme de que salga lo más blanca posible. Luego paso a lavarme la cara con jabón. Creo que podría prescindir fácilmente de este paso, ya que noto que el bálsamo me deja la piel limpísima (poros incluidos) y muy reluciente, pero tengo la manía de hacer una doble limpieza.
Como decía, la piel se queda fresca, y con una sensación muy relajante (que se agradece al finalizar la jornada). No como sucede con otros productos de este estilo, que pueden llegar a dejar una sensación “pringosa” o “aceitosa”, obligándote sí o sí a realizar el paso del jabón.
Otro punto a favor es que cunde muchísimo, ya que se necesita muy poquita cantidad para cada uso.
Tiene un ligerísimo aroma, pero no sabría decir a qué, ya que casi no se percibe.
En resumen, es un producto que me gusta y que merece la pena. El hecho de que no solo limpie, sino que también exfolie, es un punto a favor que lo ha subido directamente al puesto número 1 en la escala de mis desmaquillantes en formato bálsamo/manteca.
Pero Noray no solo tiene este Bálsamo Desquamante, sino que también ha sacado la variante “Revitalizing”. Y aquí es donde aparece Vircore (ya os decía que no estaba sola en esta entrada), con su reseña del Bálsamo Desquamante Revitalizing. Si os interesa seguir curioseando, o mirar si el otro se adapta más a vuestras necesidades, os animo a visitar su blog
¡Y esto es todo!
Espero que hayáis disfrutado de la entrada y que os haya resultado útil. Si es así, no olvidéis dejarme algún comentario bonito, que se agradecen muchísimo.
Y tú, ¿Utilizas bálsamos/mantecas/aceites para desmaquillarte? Si la respuesta es sí, ¿Cuál es tu favorito?
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¡Un besazo y hasta la próxima entrada!
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