1. Antes de comenzar a maquillarnos, conoce tu la piel para acertar con la crema adecuada
Las mujeres comenzamos a usar cosméticos a una edad muy temprana. De hecho, de niñas seguro que habéis jugado con algún pintalabios de vuestras madres. Es normal, a todas nos pasa. Sin embargo, nadie nos dice que cuando entramos en el mundo del maquillaje, antes debemos usar una crema para no dañar la piel. Y es más, ¡no nos avisan de que existen distintos tipos de pieles!
Por eso, es importante para nuestra belleza conocer que la piel de la cara es completamente distinta al resto del cuerpo y, por supuesto, la del contorno más. Así que antes del maquillaje, que no se nos olvide echarnos la crema adecuada.
2. Usar correctamente el delineador
Seguramente alguna vez os ha pasado que cuando estrenáis un delineador, no pinta demasiado bien. Existe un truco en el mundo del maquillaje para resolver este problema, además de sacarle punta al lapicero. Antes de usarlo, debemos quemar la punta con un mechero para evitar que se corra. Así conseguiremos un delineado perfecto.
3. Aplicar adecuadamente el colorete
Hay personas que no saben donde echarse el colorete, entre ellas, estaba yo. Y es que sinceramente, no lo usaba por eso. Por suerte, este truco me ayudó. Nos colocamos dos dedos como guía, el primero de ellos, debe estar tocando la nariz. Y donde finalice el segundo, con ayuda de una brocha lo aplicamos, inclinando el producto hacia arriba.
4. Hacerse rizos en minutos
Todas las que tenemos el pelo liso, queremos rizos y al revés. Existe una manera de hacernos rizos fácilmente y rápidamente. ¿Qué necesitamos? Una plancha de pelo que no supere los 250 grados y dos manos. Con una enrollamos nuestro cabello como vemos en la foto y con la otra planchamos el rizo. ¡Muy fácil y sencillo!
5. Echarse rímel sin mancharse
Millones de veces me ha ocurrido que al aplicarme la máscara de pestañas me he manchado todo el ojo. No pasaría nada si no estuviese maquillada, pero como a muchas, ocurre siempre casi al final. Pero se acabó. Tan sólo necesitas una tarjeta de crédito, un papel o una cartulina. La ponemos justo detrás de las pestañas, como en la foto, y nos echamos el rímel. ¡No te mancharás más!
6. Reparar las puntas abiertas
Muchas veces, tenemos el cabello muy dañado y seco pero nos negamos a cortarlo. Esto supone que nuestras puntas estén bastante abiertas. Por suerte, tenemos el remedio perfecto.
Mezclamos dos cucharadas de azúcar moreno, una de aceite de almendras y otra de aceite argán. Una vez hecho, lo aplicamos poco a poco por nuestro cuero cabelludo en forma de círculos. Después, echaremos una segunda mascarilla.
Para esta, necesitaremos 1/4 de taza de aceite de oliva, una cucharada de miel de maple, tres de limón, dos de miel de abeja, medio plátano maduro y por último, media taza de agua. Licuamos el plátano y después mezclamos todos los ingredientes en un bol. Lo intentamos integrar de la mejor manera y lo ponemos al fuego hasta que quede espesa. Cuando se enfríe, lo ponemos de medios a puntas con la ayuda de un peine. Cogemos un gorro de baño y nos cubrimos el cabello, esperamos 15 minutos y nos enjuagamos el cabello dos veces.
7. Secarse las uñas rápidamente
Probablemente os ha ocurrido que al pintarnos las uñas, hemos mirado el tiempo y nos hemos dado cuenta que se nos ha venido encima. Si comenzamos a usar las manos para cualquier actividad, corremos el riesgo de que se nos estropeen o nos queden fatal. Un truco para que se sequen más rápido es aplicar el secador sobre ellas o meterlas en un vaso con agua fría y hielo.
8. Desmaquillarse debería ser como el comer
¿Os ha pasado alguna vez que venimos tan cansadas que no nos desmaquillamos? ERROR. Siempre debemos hacerlo para tener una piel limpia y oxigenada. Así, evitaremos que la piel envejezca antes y pierda luminosidad. Es más, prevendremos el acné y las ojeras.
9. Salir bien en una fotografía
Para ello, requiere práctica como todo en la vida. Más que nada porque debemos conocer cuál es nuestro ángulo bueno. Todos lo tenemos. Debemos intentar no mirar a la cámara directamente puesto que resta naturalidad.
Pero si hay dos claves que debes conocer son: la posición de la barbilla y los brazos. Para evitar la papada es importante que echemos la cabeza hacia delante como una tortuga e inclinar un poco el hombro con posición de superioridad. Y para parecer más delgada, evita pegar los brazos al cuerpo puesto que parecerán más anchos.
10. Evitar que nos hagan daño los tacones
Antes muerta que sencilla. Y es que los zapatos con tacón nos estilizan la figura y nos da un toque de elegancia y feminidad. Aunque sean insoportables, son uno de nuestros mejores amigos en el mundo de la moda. Si te rozan, lo que puedes hacer es meter los tacones 30 minutos antes de ponérnoslos al congelador.
Si nos duelen, lo mejor que podemos hacer es andar con ellos antes de usarlos. Pero debemos hacerlo con calcetines de algodón humedecidos en agua caliente para adaptarlos a nuestro pie.
Pero si hay algo que no debes hacer es quitártelos. Esto es porque cuando te duelen se te hincha el pie, y luego, además de que te puede costar más ponértelos, te dolerá mucho más.
¿Qué os han parecido los trucos? No dudéis en contárnoslo en redes sociales.