Necesitaremos una redecilla de peluca para esconder nuestra melena. La pasaremos como una diadema por nuestro cuello, para después colocar la goma en la sien e ir introduciendo todo el cabello y sujetar la malla en la zona delantera. El paso anterior lo podemos hacer con el cabello un poco húmedo para que se nos haga más fácil.
A la hora de elegir nuestra peluca, es recomendable que tenga bandas elásticas, para que podamos ajustarla y que quede más sujeta. La colocaremos y ajustaremos las gomas a la medida correcta, peinándola después. ¡Y listo!
¿Qué os parece?