La adolescencia trae consigo una serie de desajustes hormonales que provocan la aparición del temido acné, que no es más que una enfermedad inflamatoria de la piel causada por una infección bacteriana que normalmente afecta al rostro, la espalda, el pecho y los brazos. Una buena alimentación y sobre todo una buena rutina de belleza no sólo ayudan a que desaparezca el acné, sino que hará que nuestra piel luzca sana y bonita todo el año.
El ácido salicílico es el ingrediente activo que debéis buscar en los cosméticos. Es muy utilizado en los tratamientos contra granos y espinillas porque penetra en los folículos cutáneos y permanece allí incluso después del aclarado, eliminando las impurezas y previniendo la aparición de granos y espinillas.
Tan importante es cuidarse por fuera como por dentro. Es muy importante beber dos litros diarios de agua, pues elimina toxinas y aporta nutrientes. Además hay alimentos que favorecen una buena piel: las frutas en general (sobre todo los cítricos), la leche, los cereales, el huevo y la carne (pues tienen vitamina B.) Los ácidos grasos omega 3 y omega 6 hidratan la piel y ayudan a conservarla tersa y suave, y podemos encontrarlos en el salmón y el acite de oliva. Por el contrario, hay que intentar reducir el consumo de dulces, charcutería y sobre todo, la comida frita (es mucho más sana para nuestro organismo y para nuestra piel a la plancha.)
El paso más importante, con mayúsculas, es la limpieza facial. Esta debe ser meticulosa y diaria, pues es el paso más importante para evitar que nos salgan granos. Lo mejor es lavarse la cara con un gel jabonoso como el de Clearasil y agua templada, antes de irnos a dormir y nada más levantarnos, así eliminaremos los restos del maquillaje, el exceso de sebo y las impurezas que se depositan en los poros. El tónico a esta edad no es necesario, aunque si queréis, podéis usar uno suave. También conviene utilizar exfoliante y mascarilla específicos una vez por semana. El de la imagen es el Exfoliante profundo para pieles sensibles de Clean & Clear.
En cuanto a cremas, lo más importante es que sean libre de aceites (oil free) ya que este ingrediente nos añadiría más grasa a la cara. Debemos hidratarnos el rostro y el cuello por la mañana y por la noche, tras el paso de la limpieza y, al menos por la mañana, nuestra crema debe tener protección solar (aunque sea invierno y aunque estemos en la ciudad.) Algunas hidratantes específicas para las menores de 20 son: Stay clear de Clearasil, que es matificante y por tanto elimina los brillos de la cara o la Hidratante correctora de imperfecciones de Clean & Clear, que trata las espinillas y evita que salgan más. Para emergencias, existen lápices y sticks tratantes, que se aplican sobre el grano y lo secan, como este de Clearasil que puedes llevar en el bolso.
Imágenes: Clearasil y Clean & Clear.