Piel de naranja, no importa con qué alimento intentemos asociarla, la celulitis no nos gusta. Alrededor del 90% de las mujeres (de todas las edades y todos los tamaños) tienen alguna forma de celulitis en sus muslos, trasero, piernas o brazos.
¿Qué podemos hacer al respecto?
A continuación lo que funciona, lo que no funciona y todo lo que necesitas saber para una piel suave y lisa.
¿Por qué tenemos celulitis?
La celulitis se hace visible cuando los bolsillos de grasas generan presión contra el tejido conjuntivo bajo nuestra piel. Piensa en qué ocurre cuando presionas tu mano o alguna parte de tu cuerpo contra las cuerdas de una raqueta de tenis, por ejemplo.
¿Por qué los hombres no tienen celulitis como las mujeres? Por la misma razón que las mujeres tienden a tener caderas más amplias o cintira más estrecha: genética. Las mujeres poseen un tejido y una piel más finos y los patrones de distribución de grasa subcutánea (bajo la piel) son distintos, lo que hace los “hoyuelos” más pronunciados y probables.
Gracias también a la genética, si tu madre o tu abuela tienen celulitis, significa que hay una buena probabilidad de que tú también la tengas. A esto sumémosle los cambios hormonales derivados de la mentruación y los embarazos, que pueden conducir a un desequilibrio de los estrógenos y causar la debilitación del tejido conectivo, lo que fomenta aún mçás la aparición de celulitis.
El aumento de peso y la flacidez que acompañan al envejecimiento también fomentan el marcado de hoyuelos en la piel.
¿Cómo disimularla?
Dale color.
Uno de los arreglos temporales más fáciles contra la celulitis es el autobronceador. Aunque la celulitis es un problema de textura, es mucho menos notable en la piel más oscura. Puedes utilizar un autobronceador instantáneo para disfrazar los hoyuelos en un santiamén o construir un bronceado más gradual tomando el sol con extrema precaución y no más de 15 minutos por día tras haberte untado con protector solar.
A sudar.
La celulitis es simplemente otra forma de grasa, así que no debe tratarse de forma distinta de lo que lo haríamos con los michelines de grasa localizada. Fíjate un objetivo de 30 minutos de cardio y añade 30 minutos más de entrenamiento de fuerza, al menos 3 veces por semana. Cuanta más definición muscular tiene una mujer, menos visible es su celulitis. Al trabajar los músculos también fortaleces la elasticidad de los tejidos conectivos, lo que puede ayudar a prevenir la formación de celulitis adicional.
Alimentación inteligente.
La mejor forma de luchar contra la celulitis y grasa localizada es dando un giro a nuestros hábitos. Añade a tu dieta una buena cantidad de frutas, vegetales y fibra y trata de acostumbrarte a los granos integrales. Cuidado con la ingesta de azúcar para evitar almacenar más grasa y aléjate de los alimentos de alto contenido en sodio para evitar la hinchazón y retención de líquidos. Permanecer bien hidratada también te ayudará a evitar la retención de agua al mismo tiempo que aumenta tu metabolismo y estimula la pérdida de peso.
Aníma tu piel con cafeína.
Antes de comprar cualquier tipo de crema reafirmante o anticelulítica busca la cafeína en la lista de ingredientes. Estudios han demostrado que la cafeína tópica puede encoger las células de grasa y estrechar los vasos sanguíneos para eliminar el agua retenida y retensar la piel al mismo tiempo que estimula la circulación y aceleración del metabolismo.
Liposucción o lipoescultura.
Si tras todo esto sigues empeñada en hacer desaparecer la celulitis, consulta a un buen cirujano plástico (y vuelvo a incidir en cirujano plástico y reparador, no solo estético) y valora las posibilidades que una intervención puede ofrecerte en tu caso. Por lo general ofrece muy buenos resultados de por vida.
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