Pues sí, los posos del café no sólo sirven para abonar las macetas y predecir el futuro, también son un buen remedio contra la celulitis. Y no lo digo yo, hace ya tiempo que la supermodelo Naomi Cambell lo viene defendiendo. Y no cabe duda que la belleza de sus largas piernas, su cuerpo perfecto y la suave piel de sus muslos y nalgas le dan la razón. La industria de la cosmética ha descubierto así para sus cremas y lociones, un nuevo y "efectivo" componente en la lucha contra los antiestéticos hoyuelos de la celulitis: la cafeína.
"La cafeína es ideal para el tratamiento de la celulitis". Dicen los diferenctes productores en los anuncios de sus últimos productos anticelulíticos. Y la verdad es que los dermatólogos hace tiempo que saben que la cafeína ayuda a deshidratar la piel. Al mismo tiempo, una enzima activa un mecanismo mediante el cual se dividen y eliminan las células de grasa. Se dice que la cafeina, frotada intensivamente como si se tratase de una crema o loción es absorvida muy eficazmente por la piel. El masaje estimula la circulación y hace que el agua excedente pueda ser transportada. Esto tiene un efecto suavizante de los antiestéticos hoyuelos de la celulitis.
Si ahora has pensado en ir rápidamente a por la última loción cafeínica contra la celulítis, te recomendamos que antes pruebes el Método Naoemie: distribuye los posos del café de la mañana diariamente por tus muslos y nalgas. Aplícate un pequeño masaje y frota hasta que la piel comience a enrojecerse. Envuelve el área de la piel tratada con film transparente y relájate unos 20 minutos. Después enjuágate. Un método sostenible y ecológico con el que seguro que te diviertes.
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¡Mucho éxito!
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