- Lavar: aunque cueste creerlo, ya desde la manera en que lavamos nuestro cabello estamos cuidándolo o maltratándolo. La forma correcta de hacerlo es con agua tibia, no demasiado caliente, aplicando el champú sólo en la raíz y masajeando suavemente el cuero cabelludo. No hace falta aplicar el champú en las puntas, ya que será suficiente con lo que cae y así evitaremos frotarlas y que se debiliten más. Toppik es una buena opción si queréis nutrir y dar volumen.
Para las puntas reservaremos precisamente el acondicionador, aceite, mascarilla o sérum acordes a nuestro tipo de pelo. Un ejemplo son los aceites capilares acondicionador y loción revitalizante con romero de Weleda, pensados para cabello debilitado y quebradizo.
- Quitar la humedad: ¿qué hacéis al salir de la ducha? Seguro que más de una se está visualizando enroscando la toalla en el pelo, ¿verdad? ¡Error! Debemos dar toquecitos con la toalla para que absorba el exceso de humedad pero nunca enroscarla, ni frotar, ya que favorecemos a que el cabello se parta. Tened en cuenta que cuando está mojado es mucho más sensible que seco. Cuando acudáis a la peluquería podéis fijaros en cómo lo hacen ellas, veréis como aprietan sin escurrir.
- Peinar: otro error frecuente es intentar peinar el cabello mojado introduciendo el peine de la raíz a las puntas. Así, solo conseguiréis tener un montón de nudos y acabaréis con un montón de cabello en el peine o las manos. Para evitar esto, cambia tu proceso de peinado: primero las puntas, luego medios y por último introducimos el peine desde la raíz. Si, además, lo haces con el cabello ya seco, mejor que mejor, aunque sabemos que no siempre es posible. Por supuesto, usar las herramientas adecuadas siempre serán un plus, como es el caso del peine Wet Brush anti-enredos de Beautik.
- Secar: no nos cansamos de oír que abusar del calor es malo para nuestro cabello y es cierto. Sin embargo, es necesario secarlo si queremos lucir un buen peinado y con volumen, así como evitar mantenerlo recogido y húmedo, algo que no ayuda a mantener una melena sana. Tan solo debemos contar con el secador adecuado, que sea capaz de regular su temperatura para no quemar el cabello. Un ejemplo que hemos tenido la suerte de probar en su presentación es el nuevo modelo Dyson Supersonic, que, además, es más ligero, potente y silencioso que un secador habitual. Asimismo, algo que nos ha gustado especialmente son sus accesorios magnéticos que permanecen fríos al tacto.
- Moldear: el abuso del calor no solo se refiere al secador, sino también a las planchas. Recuerda que existen diferentes maneras de crear ondas sin calor en el cabello, como ya os hemos mostrado otras veces. No obstante, si vais a usar la plancha, de nuevo os recomendamos invertir en un modelo que nos permita controlar el calor o esté elaborada con materiales que protegen más el cabello. Obviamente, esto también es aplicable a las tenacillas.
- Cortar: sabemos que este es el punto que menos os va a gustar pero sí, es necesario. De vez en cuando hay que sanear las puntas, sobre todo si tenemos la melena decolorada, ya que éstas irán abriéndose y dañándose. Pero, una buena noticia, si ponéis en práctica los trucos que os estamos enseñando hoy, apenas notaréis el corte, ya que vuestro cabello crecerá más rápido y sano, pudiendo espaciar las visitas a la peluquería.
- Tintes: los daños de los tintes y la coloración son conocidos por todas, aunque muchas no podemos vivir sin ellos. La industria lo sabe y cada vez encontramos más marcas dispuestas a encontrar soluciones. Lo último son los tintes en aceite y crema 100% orgánicos de Colorganics, sin amoniaco, ni parabenos, ni resorcinos o p-fenilendiamina, que ofrece el salón Oliveras de Barcelona. Además, su fórmula es rica en jojoba, té verde, aloe vera y ácido hialurónico.
- Dieta sana: no nos podemos despedir sin mencionar la importancia de cuidarnos por dentro, para que sus efectos se vean por fuera. Una dieta rica en nutrientes y vitaminas también tendrá repercusión en nuestro cabello, mostrándolo más bonito. Por desgracia, a veces el ritmo de vida que llevamos nos impide un equilibrio completo. En ese caso, podemos recurrir a un complemento nutricional que nos ayude con nuestro objetivo. Arkopharma nos trae su Arkocapil Densidad capilar a base de extracto de rúcula, cola de caballo, vitaminas, aminoácidos y minerales para un cabello más fuerte y brillante.
¿Sabes algún truco más?