Sin embargo la mejor de las noticias es que también podemos hacer unas cuantas modificaciones a nuestros platillos diarios de forma sencilla y natural para no olvidarlos del todo y poder mantener además de la línea una vida más saludable.
Utiliza el horno
Una manera muy práctica de cambiar el contexto de tus platillos favoritos, es sustituyendo la forma de su preparación, específicamente utilizando el horno en lugar de la freidora.Al hornear alimentos que usualmente freímos en aceite, no solo estarás eliminando el uso de grasa sino que conservas mejor las propiedades de tus carnes y verduras.
Más verduras
Cambia las proporciones de tu plato y estarás cambiando así los beneficios del mismo. Muchos de nuestros platillos favoritos que hemos desistido de probar por nuestra dieta, pueden volverse aliados con solo cambiar el balance de su contenido, aumenta las verduras en proporción 3 a 1 y sigue disfrutando de un plato de pozo le, unas flautas de pollo o un corte de carne por ejemplo.Añade integral
Otra forma de hacer más saludable tu alimentación de diario es cambiando ciertos ingredientes, por ejemplo si vas a comer pan, que este sea integral, lo mismo para tus acompañamientos como el empanzado, las tostadas o sándwiches. Cambia un elemento y poco a poco notaras la diferencia.Sustituye marcas por productos naturales.
Además de ser una estrategia para tu economía, al comprar alimentos naturales en lugar de la promesa comercial, te estarás asegurando de consumir realmente lo que crees, por ejemplo, en lugar de desayunar un cereal de avena de la marca reconocida que usualmente vienen adicionados con colorantes y sabor imantes, mejor consume una taza de avena natural.Con estos pequeños cambios de consumo y hábitos, puedes seguir disfrutando de platillos caseros que además de seguir consintiendo a tu paladar lo harán con tu salud.