El verano ya está aquí!!. Bienvenidos los días más largos, el tomar el sol en la playa o las piscina, largas noches de terraceo... Bien llegados los bikinis, vestidos, sandalias y mostrar algo más de piel!!.
El verano es una de las estaciones del año que más me gustan, pero los rayos UV, agua salada, arena y cloro también están presentes, es por ello que te cuento algunos de mis secretos para este verano.
1. Comienza por una buena crema hidratante
El uso de una buena crema hidratante no significa que debas de invertir grandes cantidades de dinero o que tiene que ser de una marca determinada, pero si es importante que se adecue a las necesidades de tu piel.
En verano es inevitable el sudor en la cara debido a las altas temperaturas, por lo que una crema hidratante libre de aceite y ligera en pieles mixtas a grasas es todo un acierto, en cambio una piel seca requiere productos con lípidos hidratantes naturales.
Suelo mantener las mascarillas y las crema hidratantes en el frigorífico. Es genial para refrescar la piel caliente o desinflar tu rostro.
2. Protección UV
Ya sea en la playa o en la ciudad, debes asegurarte de estar protegida contra los daños del sol, incluso si llevas o no maquillaje, vas a dar un paseo, el día no esta muy soleado... Recuerda que si estas bajo el sol durante varias horas, debes aplicarte protector solar varias veces, ya que con el sudor y el agua puede perderse. Lo ideal es evitar la exposición prolongada al sol entre las 11 am y las 3 pm, cuando los rayos del sol son más fuertes.
3. Nada de maquillaje pesado
Con el calor lo último que queremos sentir es el rostro pesado obstruyendo los poros y con demasiados brillos transfiriendo por todas partes. Cambia tu base por una BB Cream o unos polvos, incluso aplicar corrector donde lo necesitamos puede bastar; Además una máscara de pestañas a prueba de agua y un bálsamo para los labios con SPF con un toque de color son infalibles; Y si se trata de sombras de ojos, elije en crema en lugar de un polvo, ya que las sombras en crema tienden a ser más resistentes al agua y de larga duración.
Eso si, por la noche siéntete libre para ser más atrevida (o no, el maquillaje está para jugar).
4. No te olvides del cabello
Cuanto más calor hace, mi pelo tiende a secarse y aunque evito usar secador y planchas, mi salvación suelen ser los típicos peinados que nos deleitan revistas como Cosmopolitan o InStyle. Pelo recogido en una coleta, moño deshecho, trenzas o spray de agua de sal para un efecto playero, pero nunca me olvido de aplicar un spray con protección UV, además de nutrir el pelo con aceites naturales como pueden ser: Aceite de argán, aguacate, almendras, lino... O productos específicos para evitar el encrespamiento, evitar la decoloración o hidratar el cuero cabelludo.
5. Talones
Parece que solemos ser más conscientes de la existencia de nuestros pies cuando llega el momento de ponernos sandalias.
Aplicar vaselina en las áreas propensas a las ampollas e incluso en el calzado de piel hará que el propio tejido se dé de si.
Usar piedra pómez, exfoliar los pies semanalmente e hidratar es lo ideal para mantener unos pies de escándalo.
Por cierto, existe un remedio casero en el cual mezclar 1 taza de enjuague bucal, agua tibia y unas gotas de jugo de limón exfoliaran tus pies.
6. Bichos y picaduras
Estos bichitos suelen hacer más acto de presencia durante la noche gracias a unos sensores que detectan el olor corporal y, sobre todo, el dióxido de carbono que se emitimos al respirar.
Son las hembras las que necesitan unas proteínas que contiene la sangre para que se desarrollen sus huevos, por ello, usar repelentes en spray, pulseras anti-mosquitos, dormir con mosquiteras o repelentes que se ponen en los enchufes son de gran ayuda, pero también existen remedios caseros como el romero, el geranio, la citronela, los eucaliptos, el tomillo y la albahaca.
Evita a toda costa olores dulces en tu jabón, perfume, crema corporal... Les encanta!!.
Obviamente usar colores claros y estar más cubiertos si vamos a estar muy expuestos a ellos es indispensable.
7. Quemaduras de sol
Aplica gel de áloe vera, after sun o cualquier crema con Vitamina E en tu quemadura solar para evitar que la piel se desprenda y ayude a que sane más rápido.
Manténlo en la nevera para un alivio refrescante al momento, e incluso puedes aplicar pepino (tiene propiedades calmantes), o manzanilla (haz una infusión y después de enfriarla aplica con una gasa en las zonas afectadas).
Olvídate de la vaselina, la mantequilla o la pasta de dientes. Está demostrado que perjudican en vez de aliviar.
8. Sudor
Un truco de la vieja escuela es usar polvos de talco. Después de la ducha y con el cuerpo bien seco y adhiere en las zonas más propensas a sudar como las axilas o espalda.
Otro truco casero es coger un cubito de hielo y envolverlo en muselina. Limpia la cara con hielo 2-3 veces al día para curar la sudoración facial excesiva. El hielo ayuda a cerrar los poros, evitando la salida del sudor al igual que el pepino. Sabias que es un astringente natural?!. Extrae el jugo y enfríalo en el frigorífico. Puedes diluirlo en un spray o sino, usar una mezcla de té de menta o eucalipto, que gracias a su propiedades refrescantes produce una sensación de frío que hará que tu rostro no sude ni una gota.
Y sino, en el mercado existen un sinfín de sprays para refrescar la piel, revivir el maquillaje, fijar... O aguas termales.
Por cierto, si quedan manchas en la zona de la axila, rocía jugo de limón antes de tirar a la lavadora. Funciona!!.
9. Beber
Bebe mucha agua. En verano sudamos mucho haciendo que las células pierdan agua rápidamente, además beber mucha agua diluirá tu aroma natural.
Para mantener los niveles de humedad y no deshidratarnos, lo ideal es beber 8-10 vasos de agua y frutas con alto contenido en agua.
Y tú que trucos tienes para este verano?!