Os imaginaréis que me gusta probar cosas nuevas, y el blog me lo está permitiendo. Pero siempre hay días en que vuelvo a lo natural y a lo hecho por mi misma, porque me satisface el doble, por una parte compruebo que no hace falta tirar de química para obtener resultados, y por otra me siento feliz de poder hacer mis remedios/potingues con mis propias manos. El de hoy es un tónico casero, muy calmante e idóneo para pieles sensibles o deshidratadas. ¿Queréis saber como hacerlo? a seguir leyendo:
Ingredientes:
1 cucharada colmada de flores de malva
1 cucharada colmada de manzanilla
1 cucharada colmada de pétalos de rosa secos, o 2 de frescos.
Preparación:
Hacer una infusión con 60/100 ml de agua (según lo cargado que lo queramos) de todas las plantas.
Dejar reposar un mínimo de 10 minutos.
Filtrar y depositar en un recipiente a poder ser oscuro.
Guardar en la nevera.
Aquí hay varios puntos que encuentro importantes a la hora de que el tónico sea más efectivo:
El primero es que el agua debe de ser o bien mineral, termal o destilada.
El segundo es que es mejor que las plantas sean de cultivo ecológico. Si las cultivamos y recolectamos nosotr@s mismos mejor que mejor, en este caso no es difícil ya que podemos tener las tres en macetas.Son más habituales la manzanilla y las rosas, pero podemos encontrar malva en el campo muy fácilmente.
Si no podemos encontrar flores que garanticen un cultivo libre de pesticidas conviene lavarlas a conciencia antes de hacer la receta.
En cuanto a las propiedades de cada planta empezamos por la malva ya que es muy humectante, y será la que mayor hidratación nos aporte. La manzanilla contiene azuleno que nos protegerá y ayudará a mejorar irritaciones y eccemas. Y por último la rosa nos calmará e hidratará la piel de manera excepcional.
Tal y como veis no solo es fácil sino que está al alcance de todas y todos y su coste es irrisorio.
este tónico puede usarse de una manera convencional antes de aplicarnos nuestra hidratante o sérum pero tiene diversas aplicaciones como por ejemplo: en la cara después del afeitado, en las piernas después de depilarnos, pulverizado después de tomar el sol... o cada vez que necesitemos refrescarnos, calmarnos, cerrar los poros o descongestionarnos. Sus usos son muchos.
Se conserva en la nevera aproximadamente un mes lo cual aumenta sus efectos, por eso yo hago la cantidad justa cada vez.
Y con esto ya terminamos con nuestro post de hoy, espero de verdad que os haya sido útil que lo hagáis en vuestras casas y me contéis que tal os ha ido. Os espero aquí, muy dentro de poco más, muuucho más. ¡Un fuerte abrazo!