Al pasar de los 45, 50 años y más no significa el final de la vida sexual. Aunque hasta ahora así se creía y así nos veían los jóvenes.
Culturalmente también se veía así, dejando el sexo a nuestra edad excluido de la agenda pública. Pues si bien se habla mucho de sexo, nuestra edad la excluyen como si nuestra vida sexual estuviese terminada.
Esta actitud nos influye a la hora de enfrentarnos a los cambios físicos y emocionales, logicos, que tanto, hombres como mujeres experimentamos durante la edad de la madurez, y muchos preferimos despreocuparnos, por comodidad, o vergüenza de algo tan importante y placentero como es la sexualidad a nuestra edad.
Pero ahora tenemos por delante nuevo reto: ¿Cómo mantener la intimidad de pareja?
Muchísima gente cree que la sexualidad a los 50 años no es importante, pero es una manera de no querer pensar en los cambios que estamos experimentando. Y eso hace que al principio sea un poco difícil vivir esta maravillosa etapa.
Las mujeres nos ocultamos diciendo que el sexo no es importante, porque es una razón para que no sea tan difícil enfrentar la menopausia … ¿Qué cambia?
Menopausia:
La mujer enfrenta un descenso en los niveles hormonales que influyen en la lubricación vaginal, una piel más delgada, por lo que se puede presentar dolor en las relaciones sexuales.
Mientras en los hombres también hay una baja en los niveles de testosterona –aunque menor que los cambios en la mujer- que puede producir disfunción sexual.
Y mientras tanto, en el hombre…
Al final de los 40 y comienzo de los 50, los hombres necesitan autoafirmación. Por eso, a muchos les llega la etapa de querer salir con mujeres más jóvenes, comienzan a cuidarse un poco más.
Mientras tanto, las mujeres hacemos un cierre de ciclos: reproductivos, laborales y con metas económicas ya cumplidas.
¿Qué hacer?
Los expertos nos sugieren algunos consejos, cuando los cambios en la sexualidad se están presentando como consecuencia de los cambios físicos por la edad:
Olvida los tabúes
Tanto hombres como mujeres no debe darnos vergüenza preguntar, buscar información en los especialistas bien sea urólogo o ginecólogo, os aseguro por experiencia propia que están más que dispuestos a ayudarnos.
El hecho de pedir información profesional al principio de la etapa que estamos comenzando a vivir nos ayudara a que sea una experiencia totalmente satisfactoria, y sentara las bases para el futuro inmediato.
En la madurez, la sexualidad adquiere connotaciones más eróticas que genitales, lo que no quiere decir que los órganos no funcionen. ¡Adiós a esos mitos!
La sexualidad madura adquiere una connotación mucho más sabia y erótica. El sexo es un alimento del cuerpo y del alma. Por eso no debe dejarse a un lado.
Toda la vida se trabajó para este momento:
Ya vivimos el desarrollo profesional, la familia, las comodidades económicas. Y entonces, ¿que mejor momento para disfrutar?
Experimentamos cambios:
Es cierto que nuestro cuerpo cambia a medida que maduramos. Pero son cambios positivos. Una persona madura es capaz de disfrutar el sexo más allá de los genitales.
Es decir, puede trascender del aspecto meramente físico y entender la relación como una forma de afianzar los lazos con nuestra pareja. Con la experiencia, llegamos a una madurez emocional que nos permite entender el acto desde una perspectiva menos mecánica para sentirnos más satisfechos.
Debemos adaptarnos al cambio:
Los cambios suponen un paso más en nuestro desarrollo, debemos adaptarnos a las circunstancias para disfrutar de una sexualidad plena en la que nuestra edad sea una ventaja.
La comunicación es fundamental: debemos hablar abiertamente sobre nuestros temores y deseos para así poder disfrutar plenamente.
Espero vuestros comentarios.
Un saludo
Mari Carmen.
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