"Multimasking" se ha llamado a la técnica de combinar diferentes mascarillas en un mismo rostro, dentro de la misma terapia. También recibe ese nombre la aplicación de diferentes mascarillas, una tras otra.
Para elegir tu "multimasking" ideal, primero tienes que estudiar tu rostro:
PIEL NORMAL: se encuentra equilibrada, responde bien a los tratamientos y luce sana e hidratada.
PIEL SECA: produce menos grasa de la que debería, retiene menos la humedad, puede aparentar tirante, áspera, apagada.
PIEL GRASA: produce más grasa de la que debería, aparenta aceitosa, con brillos y poros dilatados, en ocasiones, también con acné.
PIEL MIXTA: la que presenta diferentes características dependiendo de la zona, mezcla diferentes tipos de piel.
El primer paso es desmaquillarse bien y retirar cualquier tipo de impurezas de la piel y una vez que sepas cómo es tu rostro y qué necesita cada zona, puedes empezar a aplicar las mascarillas que sean necesarias, personalizando totalmente tu sesión de belleza.
Se aconsejan las mascarillas de arcilla por su efectividad y sus múltiples propiedades, por ejemplo, en el caso que propuesto antes, en la zona T, frente y nariz se aplicaría una purificante, en los pómulos, una exfoliante, en el contorno de ojos una especial para ello, y en el resto del rostro una hidratante y suavizante.
Apúntate a ésta técnica y dale a tu piel lo que necesita!