Soy malísima para el tema delineado de ojos y por ello, o recurro a un lápiz marrón de Clarins que es facilísimo y cómodo de usar (review aquí) o al gel eyeliner, que con la brochita se me da bastante bien. En la mudanza a Granada me he olvidado todas mis brochas y utensilios de maquillaje (sólo me traje mi neceser con mis básicos, entre los cuales se encuentra este lápiz) así que después de mucho tiempo sin usarlo, lo he desempolvado y redescubierto.
La mina es grasa sin llegar a ser demasiado blanda, lo que hace que se deslice y pinte de maravilla. El tono es un negro muy mate que me encanta, y además, es facilísimo de difuminar para hacer ahumandos (lo difuminé en la foto con un bastoncillo, ya que mis brochas siguen en Marbella). A pesar de todas las virtudes que tiene este lápiz, mis habilidades con el tema delineado siguen siendo malísimas (sumado al hecho de que tampoco tenía sacapuntas y la punta estaba bastante redonda, pues el resultado es un poco desastre).
Con una sola pasada del lápiz el resultado es el que veis (en la imagen de la izquierda). Funciona genial en la waterline y la duración es excelente (la foto de la derecha es 6h después, tras haber sudado y todo lo demás). No se transfiere al párpado ni se corre por la ojera, a mi me encanta!
Si alguna de vosotras, expertas y amablemente, podéis arrojar algo de luz al misterio de su origen (tal vez lo hayáis visto en algún bazar, aunque probablemente haya cambiado hasta el formato) tendría con vosotras una deuda eterna!!