Lo único que necesitas es tu delineador preferido y un encendedor. Una vez que los tengas a mano, solo tienes que hacer lo siguiente:
-Sácale punta si la tiene chata, hasta que quede bien afilada como la que se ve en la foto.
-Luego vas a prender el encendedor y vas a acercar lentamente la punta, hasta que se queme y se ablande ligeramente.
-Espera a que se enfríe antes de utilizarlo de manera normal.
Este truco es buenísimo porque le da a los delineadores en lápiz una textura como en gel, que hace que se puedan deslizar con mayor facilidad sobre el párpado, dejando un color bien intenso y concentrado.
Puedes emplearlo en looks de maquillaje para diario, si quieres que tu delineado sea tu protagonista en medio de un maquillaje sencillo o estilo pin-up o bien, darle su buen uso por las noches, en un look más dramático y sensual. Lo importante es que lo pruebes con delineadores de distintos tonos y obtengas una apariencia impactante a donde quiera que vayas. Es una buena opción si no te alcanza para comprar uno en gel.
¿Qué opinas de este pequeño truco? ¿Te animas a intentarlo?
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