Sus efectos se ven al instante y aunque no son permanentes ya que los poros abiertos son difíciles de tratar, nos podemos aplicar esta mascarilla todas las semanas y con paciencia notaremos como nuestros poros son más pequeños y cada vez se notan menos.
Es importante tener la piel bien limpia y lavarla bien todos los días incluso aunque no nos maquillemos.
Para prepararla solo necesitamos tres ingredientes que son muy fáciles de encontrar en supermercados y herbolarios o tiendas naturistas.
Una fresa
una cucharada de aloe vera o sábila
unas gotas de aceite de mente o aceite de árbol de té
Mezclamos bien los tres ingredientes hasta obtener unas masa homogénea y lo aplicamos con la cara bien limpia por las zonas donde tengamos los poros más abiertos.
Dejamos que actúe 10 minutos y enjuagamos.
Podéis ver este y otros trucos en mi canal de youtube Remedios caseros con Merce, os espero.