Hace ya tiempo que el exfoliante se convirtió en uno de mis productos imprescindibles para el cuidado de la piel, aunque hasta ahora no me había resultado demasiado fácil encontrar uno que me convenciera del todo. Hoy daré mi opinión acerca de los exfoliantes faciales que he estado utilizando últimamente y os hablaré de mi experiencia con ellos
Peeling exfoliante con polifenoles My
Este producto es de la marca blanca de el Árbol, lo compré el año pasado en uno de sus supermercados cuando se estaba terminando el exfoliante que usaba hasta el momento. Además de su económico precio, una de las cosas que me atrajo de él fue su diseño sencillo, con un envase transparente a través del que puede verse el gel de color azul clarito.
¿Qué promete? “Elimina las células muertas para dejar una piel más suave, lisa y aterciopelada, afinando el poro de la piel”.
Sus ingredientes:
El producto tiene textura de gel, ni muy denso ni muy fluido, resulta sencillo de aplicar y extender. Contiene bastantes partículas exfoliantes, eso me gusta (odio cuando estos productos tienen tan poco exfoliante que no hay quien encuentre las dichosas particulitas ¿a nadie más le pasa?)
Yo lo he estado utilizando durante el último año con una frecuencia cada 10 – 15 días y estoy bastante contenta con los resultados. No recomendaría utilizarlo con mucha frecuencia ya que, aunque a mí no me ha dado ningún problema, si se insiste demasiado podría irritar. Además, esta clase de productos yo siempre los complemento con un tónico y una hidratante.
Respecto al tema de los “polifenoles” la verdad que ni idea, pero para mí esta exfoliante cumple bien su función y también los resultados que promete. Deja la piel más lisa y afina los poros (lo de la “piel aterciopelada”, ya no diría yo tanto...) y después de utilizarla se nota la piel más limpia y fina y con un tono más unificado. Además, ayuda a mejorar el aspecto de mi piel grasa y tengo la impresión de que también me ayuda con la prevención del acné.
Por ponerle una pega lo que menos me ha gustado es su olor, no es desagradable, pero para esta clase de productos prefiero un olor más suave.
Es un producto que en general me ha gustado bastante y seguramente repetiría con él más adelante, aunque últimamente en el mismo supermercado los productos cosméticos de marca “My” han sido sustituídos por la marca Bonté” (la marca blanca de Día), así que no sé si podré encontrarlo de nuevo...
Exfoliante facial de uso diario Cien
Aqua Rich
Como podéis ver, esta exfoliante también es de marca blanca. La diferencia con el caso anterior es que ésta no la compré al tuntún, sino que había oído buenas críticas sobre ella y me acerqué hasta el LIDL expresamente para comprarla (junto con el champú de naranja y almendra también de la marca Cien, del que os hablaré otro día).
En el envase podemos leer “limpieza profunda para una piel suave y sedosa”. Veamos qué tal funciona.
Se trata de un gel fluido, de color azul muy claro casi transparente y con partículas exfoliantes de color azul más oscuro. Su olor es agradable, como a jabón y no se necesita utilizar mucho producto para extenderlo bien, por lo que el envase cunde mucho.
No tiene demasiadas partículas exfoliantes, pero éstas están bien repartidas y cumplen bien su función (o al menos mejor que otros exfoliantes diarios que he probado). Es bastante suave, con lo que no me irrita la piel. Además, limpia muy bien .
Sus ingredientes:
El problema que tengo con este producto es que me acaba dejando sensación grasa. Después de aclararlo y secarme la cara, la piel se nota limpia y con buen aspecto, pero con el paso del tiempo termino notándola algo grasa y pegajosa. He de decir que es probable que sea un problema mío y no del exfoliante en sí. Yo habitualmente uso los exfoliantes diarios por las mañanas, momento del día en que no suelo utilizar tónico (que reservo para las noches o cuando limpio la piel más en profundidad) y no siento que la piel aguante realmente limpia si no uso también un tónico después.
Además, aunque ahora la tengo más o menos controlada, mi piel tiene tendencia grasa y este producto está indicado para pieles normales y mixtas, así que ese puede ser otro factor a tener en cuenta.
Por otra parte, creo que este va a ser mi último exfoliante diario en bastante tiempo. Lo he estado pensando y es un producto que en realidad no siento que necesite. Entre limpiar, tonificar, hidratar, etc etc... con exfoliar de vez en cuando ya me parece más que suficiente!
Creo que acabaré usando este producto como limpiador facial. He probado a usarlo por la noche para desmaquillarme con esponja y ¡retira el maquillaje perfectamente! Además, si uso un tónico después, se mantiene la piel limpia por más tiempo, evitando el efecto graso que comentaba más arriba.
Pasta exfoliante Manuka Tree Purifying
(Ziaja)
Tenía ganas de probar algo más allá de lo típico que encuentras en el supermercado, así que después de haber leído varias opiniones positivas acerca de esta pasta exfoliante, me acabé decidiendo a comprarla.
La adquirí a través de internet. En la web en que la compré la describen así: “Limpieza profunda, reduce eficazmente las imperfecciones y previene la formación de puntos negros. Tiene propiedades astringentes y exfoliantes, desbloquea los poros, reduce el exceso de sebo. Prepara la piel para tratamientos cosméticos posteriores”
Una de las cosas que me sorprendió fue su textura. Se trata de una pasta blanca con pequeñas partículas de color azul. Creo que hasta ahora todos los exfoliantes que había probado tenían formato gel y esta pasta me ha parecido más cómoda. Me resulta más fácil de extender y de aclarar. Además, tiene muchas partículas exfoliantes, con lo que resulta fácil de aplicar y no hay que insistir demasiado (como siempre, con estas cosas, hay que tener cuidado de no pasarse, ya que se podría irritar la piel)
Sus ingredientes:
Aunque no entiendo de estas cosas, no me ha gustado ver que incluye parabenos.
Respecto a sus resultados, promete lo que cumple: exfolia bien la piel, dejándola limpia y con los poros más cerrados y limpios. Tras usarla, noto que la piel tiene mejor color y más unificado. También me ayuda a prevenir los puntos negros y reduce el exceso de grasa (de hecho, tengo la sensación de que si la uso demasiado, podría secar algo mi piel, así que trato de no abusar y combinarla siempre con el uso de hidratantes).
Otro punto a favor es su precio: 3,99 euros.
Yo llevo utilizándola algo más de un mes y hasta el momento estoy bastante contenta con los resultados.
Hay que tener en cuenta que seguramente para algunas pieles sea algo agresiva. A mí no me ha dado ningún problema, pero se nota que “rasca” de verdad, así que hay que usarla con moderación.
Es un producto con el que quizás repetiría, aunque también he de decir que no solo me estoy replanteando el uso de exfoliantes diarios sino también el de los exfoliantes en general, así que creo que voy a espaciar aún más su uso y este envase me va a durar bastante tiempo.
¿Y vosotras? ¿Usais exfoliantes habitualmente? ¿Qué pensáis de ellos?