Las que llevan ya un tiempo conmigo lo saben: me pirran los esmaltes cremosos.
Ya si son de acabado mate, apaga y vámonos, me tendréis contenta el tiempo que dure mi manicura.
¡Es que no lo puedo evitar! Imaginaos entonces cómo estoy hoy, que os enseño el esmalte azul mate más bonito del universo…
Para aplicarse correctamente un esmalte de efecto mate la uña tiene que estar perfecta. Eso quiere decir que debe estar bien pulida, bien lisa. No hace falta llevarse media uña por delante al hacer eso, con pasar un poquito, con cuidado, un taco especial para esta función, vale.
Así las uñas quedan bien lisas, sin estrías y sin alguna
Este esmalte lleva dos capas. Una finita para tantearlo, que me gusta siempre hacerlo así… y otra un pelín más gruesa. No lleva top coat, lo veis tal cual es. Es el tono 02, de los nuevos Mat de Deborah Milano, una colección tan nueva que ni siquiera aparece todavía en su página oficial.
Como ésta es la semana del azul para el reto de los colores, preparé un diseño sencillo usando este esmalte como base. Me planté un montón de copos de nieve en los dedos índice y corazón, con ayuda de la placa BP-L018 de BornPretty Store. Los esmaltes que utilicé para ellos son dos:
Lady Mermaid de Essence (colección Effect Nail Polish Liquid Foil)
Pearlescent Purpose de Catrice (os lo enseñaba en el post Se oyen campanas de boda )
Al final cubrí la uña del meñique con Lady Mermaid y, menos anular y pulgar, protegí todo con el top coat efecto gel de Isadora. ¡El brillo también mola!
Aquí veis un pequeño macro de los brillos sutiles que dejan los esmaltes con los que estampé… ¿qué os parece? Magia, ¿verdad?
¿Vosotras la veis tipo Winter is coming o más Let it go?
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