En un mundo en el que somos cada vez más conscientes de lo que comemos, no sorprende que seamos igualmente conscientes de los ingredientes que nos aplicamos sobre nuestra piel.
Pero, ¿Qué ingredientes son buenos y cuáles son malos?
Cualquiera que sea consciente del cuidado de la piel reconocerá uno de los nombres más importantes en la lista: los parabenos.
¿Qué son los parabenos y por qué se utilizan en cosmética?
Los parabenos son una familia de productos químicos relacionados que se utilizan comúnmente como conservantes en productos cosméticos. Los conservantes pueden usarse en cosméticos para prevenir el crecimiento de bacterias dañinas y moho, con el fin de proteger tanto a los productos como a los consumidores.
Los parabenos que se utilizan con mayor frecuencia en los cosméticos son el metilparabeno, el propilparabeno, el butilparabeno y el etilparabeno.
Las etiquetas de los ingredientes de los productos suelen enumerar más de un parabeno en un producto y los parabenos se utilizan a menudo en combinación con otros tipos de conservantes para proteger mejor contra una amplia gama de microorganismos.
¿Qué clase de productos contienen parabenos?
Los parabenos se utilizan en una amplia variedad de cosméticos, así como en alimentos y medicamentos. Los cosméticos que pueden contener parabenos incluyen maquillaje, hidratantes, productos para el cuidado del cabello y productos para el afeitado, entre otros.
Actualmente, muchas marcas importantes de desodorantes no contienen parabenos, aunque algunas pueden hacerlo.
Los cosméticos que se venden a los consumidores en las tiendas o en línea deben tener una lista de ingredientes, cada uno enumerado por su nombre científico (INCI). Esta información es importante para los consumidores que desean saber si un producto contiene un ingrediente que desean evitar.
Los parabenos suelen ser fáciles de identificar por su nombre como metilparaben, propilparaben, butilparaben o etilparaben.
La controversia de los parabenos
Si bien todos los formuladores de cosméticos están de acuerdo en que los conservantes son absolutamente necesarios para prevenir el crecimiento de bacterias y moho en los productos, existen diversas opiniones y opciones de conservantes utilizados.
Los parabenos se consideran hasta la fecha el conservante más controvertido y debatido debido a muchos estudios que se han realizado poniendo en entredicho su seguridad. Además, son los conservantes más comunes en muchas de las marcas de cosméticos de farmacia.
Los parabenos son conservantes baratos que se utilizan a menudo cuando se producen en masa productos que deben permanecer en los estantes durante 2-5 años, enviados lejos y expuestos a temperaturas muy extremas.
Por tanto, son una opción cómoda y económica para las grandes empresas. Muchos formuladores de cosméticos tienen enormes márgenes de ganancia en sus productos derivados al mantener bajos los costos por unidad de producto.
Los parabenos ofrecen esa comodidad. Sin embargo, es posible que no sean saludables para los consumidores.
Los parabenos son disruptores endocrinos. Cuando se aplican tópicamente, la piel los absorbe muy rápidamente, están en el torrente sanguíneo en cuestión de horas e imitan a las hormonas (estrógeno) que alteran el sistema hormonal del cuerpo.
Algunos estudios han encontrado la presencia de parabenos en el tejido del cáncer de mama. Los parabenos también interfieren con el sistema reproductivo masculino.
Además, el metilparabeno en la piel puede reaccionar con la radiación UVB y aumentar el daño oxidativo que conduce al envejecimiento de la piel. Sin embargo, se utilizan ampliamente en cosmética.
Las empresas que usan parabenos argumentarían que están constituidos en cantidades pequeñas y aceptables que no son motivo de preocupación. Aun así, los efectos de los parabenos son aditivos en base a todos los productos que puedan utilizar los consumidores por lo que al final del día la cantidad acumulada es importante.
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