1-OBJETIVO: VIENTRE PLANO. Lucir un vientre plano es un reto para cualquier mujer, sobre todo en esta época, en la que dejamos al descubierto muchas partes de nuestro cuerpo.
-Dieta: Comer con tranquilidad, masticar bien los alimentos y evitar las bebidas con gas es un buen punto de partida al que se ha de unir una dieta baja en grasas y rica en frutas, verduras y cereales.
-Deporte: Hacer abdominales es el ejercicio estrella para lograr un vientre plano y mantenerlo. Ejercítalos de forma progresiva y correcta para evitar esfuerzos en vano y dañar el suelo pélvico. No trabajes otras que podrían resultar dañadas, como el cuelo o la espalda. Intenta hacer dos o tres series de 10 abdominales a diario.
-Tratamiento: Existen muchas cremas y geles reductores específicos para esta zona que ayudan a reducir la grasa localizada.
2-GLÚTEOS FIRMES. Es una de las zonas más rebeldes y que más se resisten a la hora de quemar grasa. La dedicación y la constancia son clave para lograr unos glúteos redondeados, firmes y sugerentes.
-Dieta: Evita los alimentos fritos y los que contienen elevadas dosis de azúcar y grasas saturadas, ya que suelen concentrarse en esa zona corporal. Apuesta por el té verde: tu mejor aliado para eliminar toxinas y quemar grasas.
-Deporte: El sedentarismo y la inactividad física son los principales enemigos de tu trasero. Además de realizar actividad física con regularidad, céntrate en hacer ejercicios específicos para endurecer las nalgas. Si vas al gimnasio, haz clases de step para tonificar tus glúteos, y si, prefieres ponerte en forma en casa, opta por las sentadillas. Apoya tu espalda en la pared y deslízate a medida que flexionas las rodillas.
-Tratamiento: Los geles reafirmantes ayudan a tonificar e incluso elevan los glúteos. Para ello, aplícate a diario un masaje circular hasta que el gel quede absorbido.
3-PIERNAS TORNEADAS CON EJERCICIO. Las caderas y los muslos son las zonas de tu pierna que suelen acumular más grasa. Presumir de piernas torneadas y firmes es cuestión de proponértelo.
-Dieta: Los frutos secos y el pescado azul favorecen la circulación sanguínea, reduciendo la flacidez y ayudando a prevenir la celulitis en esa zona.
-Deporte: Ir en bici y hacer Pilates tonifica los músculos de las piernas y mejora la circulación. También puedes hacer este ejercicio: colócate de pie con las piernas juntas, las manos en la cintura y la espalda recta. Adelanta el pie derecho y flexiona la pierna derecha, de manera que vayas bajando hasta formar un ángulo de 90 grados. Mantente unos segundos en esta posición y vuelve a la inicial. Repite con la otra pierna.
-Tratamiento: Los masajes son una excelente opción, ya que actúan como drenaje linfático, estimulando el flujo sanguíneo y acelerando la circulación.
4-BRAZOS EN FORMA.
-Flexiones: Estos tradicionales ejercicios, consistentes en ejercitar las extremidades superiores (teniendo apoyados en elsuelo las manis y los pies), son la mejor terapia para tonificar y endurecer los brazos. Realiza dos series de 15 flexiones al día. Las pesas también son una buena opción para reafirmarlos: sostén una en cada brazo y elévalas en paralelo al cuerpo.
-Cremas contra la flacidez: Existe una gran variedad de cremas reafirmantes que contienen colágeno y elastina, dos proteínas que aportan elasticidad a la piel. Date un masaje enérgico todos los días.
Ten en cuenta que todos estos consejos serán efectivos siempre y cuando seas constante con ellos, ¡una buena alimentación y el ejercicio son las principales claves para tener un cuerpo de impacto!