La grasa que se acumula bajo la piel en algunas zonas del cuerpo puede suponer una verdadera pesadilla para algunas personas que ven cómo su silueta no es todo lo bonita que les gustaría. Por ello, no son pocos los que se plantean someterse a una liposucción para deshacerse de los kilos de más. No obstante, el tener que entrar a un quirófano, con anestesia general, hace que para la mayoría se quede en un mero pensamiento.
Sin embargo, seguro que si se idease una solución con las mismas ventajas, pero sin tener que someterse a una operación, más de uno daría el paso definitivo para lucir esa figura soñada. El invento ya es una realidad: Novashape, el lipomodelado corporal permanente sin cirugía.
Guerra a la grasa localizada
Gimnasia, dietas, cremas... En ocasiones, ni todo esto es suficiente para eliminar esa celulitis que se adhiere a nuestras caderas, muslos o abdomen. Afortunadamente, el mundo de la belleza cada vez nos sorprende más, poniendo al alcance de nuestra mano el poder conseguir ese cuerpo que siempre hemos envidiado. Lo último para reducir la grasa localizada es Novashape, un tratamiento sencillo e indoloro.
Desde los centros Instimed, explican que este tratamiento utiliza "una tecnología de remodelación corporal basada en la aplicación de ultrasonidos de nueva generación de alta potencia, diez veces superior a la tradicionalmente usada en estética". Esta técnica es capaz de destruir las células grasas gracias a la emisión de ultrasonidos que "generan microburbujas que primero implosionan y más tarde estallan", agregan los expertos.
Este procedimiento hace que se favorezca la rotura de las paredes celulares, facilitando así la mejor metabolización de la grasa y que nuestro cuerpo la elimine de manera natural. Desde el centro médico-estético, aseguran que "el uso de Novashape genera un resultado similar a una liposucción sin que el paciente se haya tenido que someter a una intervención quirúrgica".
Paso a paso
- La sesión comienza con la infiltración de una solución salina hipoosmolar en la zona que se va a tratar.
- A continuación, se realiza un masaje manual para que el líquido se reparta de forma uniforme y se espera unos quince minutos para que los adipocitos se hinchen al máximo con el suero infiltrado y consigan una gran densidad.
- A partir de ahí se trabajará la zona con una manipulación específica que realizará la vibración ultrasónica longitudinal, dando lugar al fenómeno de la ultracavitación, es decir que las burbujas creadas implosionen y rompan las membranas de las células grasas.
- Es imprescindible realizar después de cada sesión un tratamiento de drenaje linfático para favorecer la eliminación de líquidos, más aun teniendo en cuenta, que a diferencia de otros tratamientos, se ha infiltrado una solución salina en el organismo.