Nos encanta cortarnos el pelo de vez en cuando, pero luego, ¡tarda tanto en crecer! Aquí tenéis 12 aceites recomendados para impulsar el crecimiento del cabello y, además, tres tratamientos muy efectivos. ¡Ojalá te funcionen bien!
Aceite de coco
El aceite de coco protege, limpia y nutre el cabello. Gracias a su forma química puede penetrar fácilmente en el folículo piloso y actuar desde el interior del pelo. El aceite de coco evita la pérdida de proteínas del pelo y reemplaza los aceites naturales del cabello que se han deteriorado debido a la exposición diaria a las toxinas y champús corrientes. A parte de notar el pelo más sano verás como crecerá más rápido.
Aceite de Oliva
La hormona dihidrotestosterona (DHT) reduce el tamaño del folículo piloso, lo cual es la causa de muchos casos de calvicie masculina. El aceite de oliva bloquea el DHT y así ésta ya no puede reducir el tamaño del folículo piloso y el pelo no se cae. Además, contiene muchos antioxidantes, estimula la circulación sanguínea y aporta nutrientes al cuero cabelludo y a los folículos pilosos.
Aceite de Lavanda.
Si se te cae de forma excesiva el cabello este aceite es ideal. Permite que el pelo vuelva a crecer si se aplica a diario durante varios meses.
Aceite de Ricino.
Aunque comúnmente es conocido por su uso como laxante natural, el aceite de ricino es también es muy eficaz en el tratamiento de la pérdida del cabello. El aceite de ricino contiene ácido ricinoleico, un potente agente anti-bacteriano y anti-fungicida que protege el cabello y el cuero cabelludo de infecciones. Los ácidos grasos omega-9 y las propiedades humectantes del aceite hidratan y nutren el cabello dejándolo más grueso, brillante y fuerte.
Aceite de Jojoba.
Esta cera líquida se parece en composición al sebo natural producido por nuestro propio cuerpo. A diferencia de la mayoría de los otros aceites utilizados en los tratamientos del crecimiento del pelo, el aceite de jojoba no penetra en el cabello. Más bien sella el folículo piloso para no dejar escapar la humedad.
Aceite de Almendras.
Protege e hidrata el cabello. Este aceite elimina la acumulación de células muertas de la piel, alivia la inflamación del cuero cabelludo y permite que el pelo crezca libremente. Aunque el aceite de almendra no es conocido como que ayude a crecer el pelo, sí protege y estimula el crecimiento de los folículos pilosos existentes haciéndolos menos propensos a la rotura.
Aceite de Romero.
Ayuda a dilatar los vasos sanguíneos y estimula la división celular. Esto, a su vez, estimula los folículos del pelo para producir nuevos cabellos. El aceite de romero también inhibe tanto la pérdida de cabello como la aparición de canas. Además ayuda a eliminar la caspa.
Aceite de pescado.
Contiene 2 ácidos grasos omega-3 esenciales, el ácido eicosapentaenoico (EPA) y ácido docosahexaenoico (DHA). No hay evidencias científicas que relaciones el consumo de aceite de pescado con la prevención de la caída del pelo pero hasta día de hoy se cree que tiene las mismas propiedades en el pelo que en la piel. A diferencia de otros aceites esenciales, el aceite de pescado no se utiliza por vía tópica. Se toma en forma de cápsula y pone sus poderes curativos a ser utilizados desde dentro hacia fuera.
Aceite de Árbol de Té.
El aceite de Árbol de Té (comúnmente conocido como aceite de melaleuca) ayuda a desbloquear los poros tapados en el cuero cabelludo. También hidrata la piel y el pelo. Es muy eficaz para reparar el dañado del cabello y permite crezca largo, grueso, fuerte y saludable.
1. Tratamiento caliente de aceite de Aguacate.
El aceite de aguacate es una fuente poderosa de propiedades beneficiosas que son todas muy importantes cuando se trata de mantener el cabello bien nutrido y saludable. Este potente brebaje compuesto de vitaminas esenciales, incluyendo la vitamina A, esencial para promover el crecimiento de células sanas de los folículos pilosos, vitamina B6 para mantener el color y el brillo del cabello, y a prevenir la pérdida de cabello; y la vitamina E, un poderoso antioxidante que ayuda a aumentar el fluido sanguíneo a los folículos del pelo y el cuero cabelludo para estimular el crecimiento del cabello sano.
Ingredientes:
1 cucharada de aceite de aguacate
1 cucharadita de aceite de oliva
Cómo aplicarlo:
Mezclar los aceites juntos y calentar ligeramente. Masajea con los dedos el cuero cabelludo y el cabello durante 15 minutos aproximadamente. Moja una toalla con agua caliente, escúrrela bien y luego envuelve el cabello con la toalla y deja que actúe durante 20 minutos.
Enjuaga y lava como de costumbre.
2. Tratamiento para el pelo con Aceite de Mostaza.
El aceite de mostaza contiene altos niveles de selenio y zinc y estimula el cuero cabelludo dando calor y aumentando la circulación sanguínea de la zona capilar. Todo ello favorece el crecimiento del pelo. Lo hace más fuerte e incluso ayuda a prevenir y reducir la caída del cabello.
El pelo queda más fuerte y saludable y crece más rápidamente. La tercera semana desde la aplicación ya notarás los efectos. Tienes que aplicarlo al menos tres días a la semana,
Cómo aplicarlo:
Peina el cabello y sepáralo en dos partes diferenciadas.
Coloca una pequeña cantidad de aceite en la palma de tu mano y frótalo para que se distribuya por la mano.
Aplica el aceite de mostaza en un lado del pelo con un suave masaje desde las raíces y luego repite lo mismo en la otra parte.
Peina el cabello de nuevo el pelo.
Cubre con papel plástico o un gorro de ducha.
Seca el pelo con un secador durante aproximadamente 10 minutos para asegurar que el aceite penetra en el eje del pelo.
Lava bien el cabello y enjuaga con agua fría.
3. Receta para tratamiento para cabello con Aceite de semilla de uvas.
El aceite de semilla de uva contiene potentes propiedades hidratantes que se consideran eficaces cuando se utilizan en el cabello y el cuero cabelludo; tiene la capacidad de transformar el cabello como ningún otro sistema de tratamiento del cabello. Este aceite en particular es mucho más ligero y con menos grasa que sus rivales, como el aceite de oliva, debido a su composición ligera que se absorbe fácilmente en la piel y el cabello sin apelmazar y eliminar el volumen. El aceite de semilla de uva es adecuado para su uso con cualquier tipo de cabello y porque contiene cualidades hipoalergénicas, es ideal para aquellos que tienen la piel sensible. Es una sustancia clara y es casi completamente inodora, por lo que es el compañero perfecto para el uso con los champús y acondicionadores naturales.
Ingredientes:
4 cucharadas de aceite de semilla de uva
4 cucharadas de aceite de jojoba
¼ cucharadita de ylang ylang
¼ cucharadita de lavanda
Cómo aplicarlo:
Pon el aceite de semilla de uva y aceite de jojoba en una bolsa de plástico con cierre hermético.
Añade ylang ylang y lavanda.
Sumerge la bolsa de plástico en un recipiente con agua caliente durante aproximadamente 3 minutos o hasta que el aceite se siente caliente.
Elimina el aceite de la bolsa y colócala en otro recipiente.
Aplica la mezcla directamente sobre el cuero cabelludo dando un suave masaje suavemente con las yemas de los dedos por todo el cabello. Deja que actúe durante unos 30 minutos y luego enjuagar y lavar como de costumbre.