El tomate no solamente sirve para preparar deliciosos platillos sino que también por poseer propiedades antioxidantes, ayuda a aclarar la piel, puede ser utilizado en el tratamiento del acné, y tiene propiedades astringentes. El bicarbonato de sodio, actúa como un exfoliante natural, contribuye a la eliminación de las células muertas y reduce manchas entre otros.
Exfoliación a base de tomate y bicarbonato de sodio
Con el tomate y el bicarbonato de sodio se realiza una excelente exfoliación, que además es muy económica ya que los ingredientes los tiene en casa, no tienes que salir a comprarlos. Solamente vamos a necesitar dos tomates medianos y dos cucharadas de bicarbonato de sodio.
Para iniciar la exfoliación elaborada con el tomate y el bicarbonato de sodio, lo primero que vamos a hacer es lavar los tomates y picarlos por la mitad, lo humedeces con el bicarbonato de sodio y comienzas a exfoliar y masajear ya sea tus brazos o piernas, esas partes de tu cuerpo que quieres aclarar o reducir las manchas. Luego lo retiras con bastante agua tibia. Lo puedes realizar dos veces por semana preferiblemente antes de dormir. El cambio se aprecia desde la primera aplicación.
¿Para qué sirve esta exfoliación elaborada con tomate y bicarbonato de sodio?
El tomate y el bicarbonato de sodio, son completamente naturales. Te permiten recuperar el color de tu piel, también ayudan a aclarar los codos, rodillas y esas manchas producidas por el sol. Es una sencilla receta a base de pocos ingredientes. Puedes realizar este tratamiento con la seguridad de que te ayudará a recuperar la suavidad y el brillo de tu piel. Lo que requieres es constancia, valdrá la pena ya que los resultados los verás rápidamente.