Las que tenéis la forma de la cara alargada debéis restarle verticalidad, lo que se consigue con la aplicación en línea recta, de manera horizontal, desde el centro del pómulo hasta la oreja.
Si, además, tenemos bastante marcadas las mandíbulas y los pómulos, es mejor extenderlo en el centro de los mismos mediante movimientos circulares, con el fin de suavizar nuestros rasgos.
Aquellas que tengáis el rostro redondo, tenéis que añadir verticalidad, por lo que la aplicación se realizara mediante una línea diagonal que va desde la mitad de la mejilla hasta la sien. Y de esa manera causaran una ilusión óptica de verticalidad en el rostro.
Fotos: Bitchielife.necolebitchie, Blogs.smarter, Real beauty y Make up talk.
¿Qué les ha parecido? ¿Ya tenían idea de estos trucos?