Las brochas y los pinceles son uno de los utensilios más utilizados al maquillarnos.
Una parte de la rutina de belleza debería ser mantenerlos limpios. Estas útiles herramientas de belleza van acumulando células muertas, grasa, bacterias y polvo y si no los limpiamos periódicamente puede causar problemas en la piel como granitos y acné y además contaminar el maquillaje lo que reduce su vida útil.
Es importante tener en cuenta que las brochas sintéticas son las más adecuadas para aplicar el maquillaje líquido, como el rimel y la base y las que están hechas de cerdas naturales son ideales para los productos en polvo, como el rubor y las sombras compactas.
Claudia Hayes del salón Make-up Center de Nueva York nos brinda sus conocimientos y consejos para mantener tus instrumentos siempre limpios y suaves.
El lavado
Colócalos boca abajo, para mantener la dirección del pelo. Mójalos bajo la llave con agua tibia y luego lávalos con un jabón líquido neutro o champú de niños. También puedes usar un jabón suave como el de Castilla.
Lava haciendo movimientos suaves y circulares con tus manos. Enjuaga una vez; si notas que quedó residuos, repite.
Seca suavemente, con papel absorbente o una servilleta de papel. Siempre manteniendo la dirección natural del pelo.
Secado
Ponlas a secar al aire. Si no puedes sostenerlos boca abajo, colócalos en posición horizontal y acomoda la dirección del pelo para que cuando se seque quede perfecto.
Asegúrate que la base de metal quede seca para que no dañe el pegamento.
Dependiendo de la temperatura o la humedad del ambiente puede tardar de uno a tres días. Trata de colocarlos en un lugar seco de la casa, evitando los lugares húmedos como el baño.
Frecuencia
Lo ideal es limpiaros una vez por semana, especialmente si te maquillas todos los días. Si te maquillas solamente algunos días a la semana, puedes lavarlos una o dos veces al mes.
Es importante que solamente tú uses tus utensilios de maquillaje, especialmente en esta época de pandemia.
Desinfección
Si quieres hacer una limpieza profunda que incluya desinfectar, puedes usar una solución de 1/4 de alcohol al 96% diluido en 3/4 partes de agua.
Sumerge tu brochas y pinceles en esta solución y deja que suelten los residuos. Verás como se tiñe la solución.
Retira y seca con papel absorbente y ponlos a secar.
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