La maternidad y el aumento de de peso, provocan pérdida de definición de la cintura. Si a ésto, se le suma la falta de ejercicio y una dieta inadecuada, es probable que la cintura pierda toda su forma.
Aunque los cánones de belleza, cambian constantemente, la cintura estrecha es uno de los rasgos del cuerpo de la mujer, del ideal de belleza y feminidad.
En los siglos XVI Y XVII, las mujeres lucían cinturas de avispa gracias a los corsés. Y aunque en los últimos años, la tendencia has ido hacia un cuerpo con menos curvas, todo vuelve, y la cintura de avispa está de moda.
Este cuerpo con figura de reloj de arena (cintura estrecha, y caderas y pecho más voluminosos), es el ideal para lucir pantalones de talle alto, que han vuelto a las tiendas o la falda de lápiz.
Otra prenda que ha vuelto con gran fuerza es el corsé, popularizado por las Kardashian.
Consejos para Reducir la Cintura.
- Dieta Sana.
Evitar los alimentos procesados.
Consumir frutas, verduras y proteínas.
- Beber Agua.
Evitar refrescos gaseosos, zumos azucarados, etc.
Consumir Agua, Zumos naturales, Tés.
- Ejercicio.
Caminar, Bicicleta, etc.
- Fortalecer Abdominales.
Si bien no es, la llave mágica para conseguir una cintura de avispa, fortalece la musculatura del abdomen, aportando definición a la Cintura.
- Practicar Yoga, Pilates o Danza de Vientre.
Estas prácticas ayudan a quemar grasa de la cintura y a definirla.
Además de todos estos útiles consejos, existe un método de origen japonés en el que sólo se necesita una toalla.
Se trata de un estiramiento de los músculos del abdomen que ayuda a alargar el arco entre la cintura y la cadera, además de remover la grasa acumulada.
- Tumbarse en el suelo.
- Enrollar la toalla y colocarla debajo de la cintura.
- Levantar los brazos por encima de la cabeza.
- Separar las rodillas y hacer coincidir los pies entre sí.
Dedicarle a este ejercicio entre 10 o 15 minutos al día.
Si se nota alguna molestia, interrumpir el ejercicio de inmediato.