Ahora que parece que empezamos a ver la luz al final del tunel, y siempre pensando primero en nuestra salud y la de los demás, hay bastantes cosas que podemos hacer para que la economía de nuestro alrededor mejore, porque buena falta nos hace. Pequeños negocios que dependen de nosotros para subsistir, que dan trabajo a gente cercana y que le dan vida a nuestras ciudades. Estas son mis ideas.
Veo mucho en las redes sociales esas publicaciones pensando qué haremos cuando salgamos de la cuarentena, confinamiento o como queramos llamarlo. Ir a abrazar a nuestras familias, dar largos paseos al aire libre, disfrutar de la naturaleza, viajar... Esas acciones son las primeras que creo que debemos hacer. Pero también están las que supondrán una ayuda a los pequeños negocios que tenemos cerca.
Aunque aún no tenemos muy claro esto de las fases y de cuándo vamos a poder operar de nuevo con normalidad, lo cierto es que desde hoy ya hay pequeños negocios que pueden levantar la persiana. Dejando a un lado esos porcentajes que nadie entiende y que sinceramente me parecen incongruentes, pensemos en lo positivo y en ayudarles entre todos, ¿os parece?
Se me han ocurrido varias ideas que os quiero contar, a ver qué os parecen (os pondré mis elecciones en Granada y podéis pinchar en cada nombre para saber más de ellos, por si vivís en la misma ciudad que yo, pero pensad en las que tenéis cerca vosotros):
-Ir a la peluquería. Parece una idea un poco frívola, pero la estilista de vuestro barrio necesita volver a facturar y además seguro que vuestra melena necesita una puesta a punto como agua de mayo, ¿verdad? Ya sabéis que yo soy fiel a Bargaris Peluqueros.
-Hacerme con un nuevo look, de la cabeza a los pies. Yo pienso pasarme por La Familia Mujer, que sabéis que tienen unos modelazos de invitada ideales pero también tienen ropa de diario preciosa. Para zapatos, El Rayo es siempre mi primera opción. Y para complementos a buenísimos precios, Princess. En Albolote, las chicas de Emilia Huete también son amigas a las que iré a ver.
-Hacerme la manicura o un tratamiento facial para preparar la piel para estar al aire libre, por fin. En este sentido, siempre voy a Divas y ya tengo mi cita mañana.
-Ir a comer, a cenar, o simplemente a tomar algo a uno de los bares y restaurantes de mi ciudad. En Granada hay miles, literalmente, pero David y yo sentimos debilidad por La Esquinita de Javi. Aunque no sabemos cuándo podremos ir con normalidad...
-Comprar flores, una tarjeta de regalo o un detalle a alguien a quien no veía hace mucho o que ha pasado su cumple en la cuarentena. En La tienda de Alex tenéis cosas muy monas.
-Comprar lencería y pijamas nuevos. Después de habernos visto todo este tiempo con los mismos, y además ahora que llega el buen tiempo, vamos a renovar la ropa de estar por casa. En Al Costo y Alabama Underwear (tienen tiendas en muchos lugares de Andalucía y Extremadura) tienen cosas súper bonitas.
-Hacerme con una nueva rutina de belleza. Las perfumerías de vuestro barrio lo van a agradecer. Yo voy a optar por hacerme con un nuevo set de cuidado de la piel completamente personalizado en Ab7 Cosmética.
-Aprender a bailar. Siempre he querido saber bailar bien, la verdad. Además, es una manera estupenda de quemar calorías y mejorar la postura, así que en cuanto abran la Escuela de Danza Gracia Díaz la menda lerenda se apunta a todo.
Por supuesto, no estoy diciendo que hagamos todo a la vez, que soy la primera que es consciente de que nuestras economías domésticas no estarán precisamente boyantes. Pero podemos hacer una cada semana. O cada dos semanas. Si lo hacemos todos, será un pequeño empujón muy necesario para estas pymes.
¿Qué pensáis sobre esto? ¿Se os ocurre alguna otra idea que podamos poner en marcha para ayudar?